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España España · Tarragona
Voto de XuCoOo:
6
Bélico. Aventuras A finales del siglo XIX, en la colonia española de Filipinas, un destacamento español fue sitiado en el pueblo de Baler, en la isla filipina de Luzón, por insurrectos filipinos revolucionarios, durante 337 días. En diciembre de 1898, con la firma del Tratado de París entre España y Estados Unidos, se ponía fin formalmente a la guerra entre ambos países y España cedía la soberanía sobre Filipinas a Estados Unidos. Debido a esto, los ... [+]
21 de diciembre de 2016
6 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con apenas 50 soldados, el destacamento aguantó las acometidas de los filipinos del pueblo de Baler, en la isla de Luzón. Nominada a 9 Goyas, LOS ÚLTIMOS DE FILIPINAS se convierte en una obra histórica de referencia en el cine español, aunque tiene un aire antibelicista que se nota desde el primer momento y que muchos hubieran preferido que no tomara partido, sino simplemnete mostrar una guerra y unos personajes sitiados desde casi su llegada al pueblo. Unos protagonistas interpretados por la flor y nata del cine español, la mitad de ellos grandes veteranos y la otra mitad llamados a seguir sus pasos. Sin embargo, algunos están desdibujados y, a pesar del exceso metraje, el espectador apenas se queda con dos o tres.

Esos dos o tres, sin duda, no son otros que el propio Luis Tosar, pilar fundamental, Carlos Hipólito y Javier Gutiérrez, brillantes como siempre y bien acompañados por Eduard Fernández y un Karra Elejalde que cierra el grupo de los veteranos pero que, sin duda alguna, es totalmente prescindible para la trama y así agilizar la película. De los jóvenes solo hay uno que emerge ante los demás y se erige protagonista del filme, y no es otro que Álvaro Cervantes, un aspirante a pintor con el que sufrimos el sitio durante los 337 días. Irá acompañado por soldados novatos interpretados por Patrick Criado, Miguel Herrán y un Ricardo Gómez que, incomprensiblemente, para mi entender, ha obtenido una nominación como actor revelación en los Goya.

Y es que, como veis, el elenco es tan bueno y amplio que es comprensible que muchos personajes pasen desapercibidos. Es el caso también de Ricardo Gómez, por ello no entiendo el porqué de su nominación. Sí es más entendible la de Javier Gutiérrez, un sargento superviviente del último escuadrón que da la bienvenida y se une al nuevo con ansias de venganza. LOS ÚLTIMOS DE FILIPINAS es una película dramática desde casi el primer minuto, quizás demasiado, ya que transmite el gris de unos personajes que en ocasiones llega a hastiar, sobre todo teniendo en cuenta el exceso de metraje, nada menos que 130 minutos que podrían haber recortado con facilidad al no incluir subtramas como la de Karra Elejalde.

En todo caso, hay que hablar de que es la ópera prima de Salvador Calvo, algo más que plausible, ya que competirá en la nominación a director revelación contra el que para mí es el vencedor: Raúl Arévalo y su Tarde para la ira. Como veis, el nivel es tan alto que invita a soñar con las nuevas generaciones de directores. Y es que LOS ÚLTIMOS DE FILIPINAS cuenta con una ambientación brutal, unos planos aéreos que quitan el sentido y una fotografía que nos inserta de lleno en esos parajes frondosos y salvajes. Los Goya han sabido reconocer todo ese trabajo, nominándola también, aparte de actor revelación y director, a mejor dirección de producción, fotografía, dirección artística, diseño de vestuario, maquillaje y peluquería, efectos especiales y sonido. Como intuiréis, no han escatimado en presupuesto y el trabajo es de gran calidad y con todo lujo de detalle.

Las escenas de acción están bien trabajadas, reflejando el dolor de la pérdida y el agobio absoluto al que se ven sometidos durante los 337 días de asedio. No solo sufren las balas de los filipinos, sino también el hambre y una convivencia dura gracias a los personajes de Javier Gutiérrez y Luis Tosar, este último sin querer dar crédito a las noticias que narraban que España había perdido la guerra y las colonias, por lo tanto, la guerra que libraban se convertía en inútil por completo. Las aspiraciones de los hombres se dividían en dos: aquellos obligados por la necesidad y otros que querían las medallas.

En definitiva, 1898. LOS ÚLTIMOS DE FILIPINAS es una gran película histórica que narra el final de un imperio, bélica y dura, quizás con demasiado drama, aunque con un reparto a la altura y de gran calidad. Unas imágenes espectaculares y la guerra en estado puro. Es muy larga y se toma su tiempo, pero si es de vuestro interés, valdrá la pena verla. No os la perdáis.
XuCoOo
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