Desde que era muy joven he escuchado una realidad que es muy cierta, tememos lo desconocido, aquello que no conocemos nos quita el aire, es así de cierto.

Jorge Sánchez-Cabezudo pone en práctica algo muy relacionado con dicho asunto, el desconocimiento, si además le sumamos los ingredientes de un hecho dramático y estar en un pueblo, tenemos los mimbres juntitos para hacer una película bastante interesante y entretenida.

A un pueblo del territorio español llega un grupo de espeleólogos a explorar una cueva, en ella se adentran Esteban y Pedro. Gabi, la novia de Esteban los espera fuera, hasta la zona se acerca un desconocido bien vestido que la atacará y perseguirá, desatando una cadena de trágicos sucesos qué enlazarán a muchos personajes del pueblo.

Me han encantado bastantes cosas de la película, la localización rural es perfecta para lo que se nos mostrará más tarde, esto contado en suelo urbano, no funcionaría. Magistral. El elenco de actores está perfectamente escogido en función al personaje a interpretar, hagan un ejercicio mental y cambien papeles para confirmarlo. El guión una maravilla, se nota a que se dedicaba el mozo que se pone detrás de la cámara.

Me ha llamado mucho la atención el hecho de estar contando varias historias paralelas a la vez, que no se le haya dado más cancha a la del vendedor ambulante que es parte principal en este relato. Me ha sorprendido negativamente, creo que se le podría haber sacado más partido.

Buen debut y grata sorpresa, que deja a las claras que nuestro cine tiene mucha calidad.