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Voto de Reaccionario:
5
Drama Las hermanas Jane y Blanche Hudson fueron estrellas infantiles de Hollywood, pero sus carreras siguieron trayectorias muy distintas. Mientras que Jane, al crecer, fue olvidada por el público, Blanche se convirtió en una actriz de éxito. Tras un misterioso accidente de coche, Blanche quedó postrada en una silla de ruedas al cuidado de su hermana Jane, que disfruta atormentándola. (FILMAFFINITY)
23 de mayo de 2013
13 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me desconcierta un poco esta película. Por un lado, se me ha hecho aburrida, especialmente en la parte intermedia, tras los primeros compases. Luego esta mezcla de thriller y drama no acaba de ser redondo ni en una cosa ni en la otra. Sobre lo primero, hay algunos fallos temporales e incongruencias señaladas por algunos de vosotros como para pasarlas por alto. Además la situación de la pobre Blanche (Joan Crawford) dista de ser angustiosa. Por otro lado, la parte dramática no afina lo suficiente. Después de todo, ¿de qué habla nos habla la película? ¿Del fracaso, la decadencia, la locura, los celos, la envidia, la vejez, el alcoholismo, la maldad, la hipocresía o el mundo del artisteo? De todo un poco pero lo que gana en amplitud lo pierde en profundidad. Además me temo que tanto a uno como a otro personaje les falta desarrollo psicológico.

Como virtudes no puedo negar que en el fondo hay cierta intriga, un espíritu malsano y un conjunto de temas señalados antes que pese a todo, están ahí. En este sentido me recuerda a "Un tranvía llamado deseo" especialmente por el paralelismo evidente entre Baby Jane (Bette Davies) y Blanche Dubois (Vivien Leigh). Sin embargo la obra de Elia Kazan es mucho más intensa, profunda y compacta que la de Robert Aldrich, lo mismo que el personaje de la inglesa que está mejor definido que el otro. Lo bueno de "¿Qué fue de Baby Janes?" es que viéndola te das cuenta de lo bien hecha que está "Un tranvía llamado deseo". Entrando un poco más en lo anecdótico, Bette Davies y Joan Crawford no están nada mal pero para ver a dos hermanas y enemigas hubiera sido un puntazo que las protagonistas hubieran sido Olivia de Havilland y Joan Fontaine.
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