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España España · Barcelona
Voto de Ochentero:
5
Drama Nikki (Ashton Kutcher) es un mujeriego que, gracias a su atractivo sexual, vive rodeado de lujos. Acude a fiestas y se acuesta con multitud de mujeres a la vez que se da la gran vida en una casa de Hollywood Hills, propiedad de Samantha (Anne Heche), una abogada de mediana edad. Todo marcha bien hasta que conoce a una preciosa camarera llamada Heather (Margarita Levieva) que, en principio, parece inmune a sus encantos... (FILMAFFINITY)
15 de octubre de 2009
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Creo que el problema que puede tener esta película es que la gente no acabe de entender que es lo que intenta hacer entender.
Esta película intenta apagar los humos de todos aquellos que se crean que el mundo está a sus pies por ser guapos.
La película comienza con el personaje de Ashton Kutcher dando una infinidad de estupidos consejos para ligar (que aconsejo no tomar en serio) y para hipnotizar a través de una especie de ciencia oculta que él mismo cree.
La cosa al principio le va genial. Él es una persona arrogante, egoista y vanidosa. Sé cree muy listo. Vamos, de esos que tantos y tantas hay (Muchas más chicas que chicos, para que engañarnos).
Pero la cosa se tuerce precisamente por considerar que las relaciones personales es algo con lo que se puede frivolizar. Lo primero, porque aunque muchas veces la gente es buena, pero no tonta. Tanto hombres como mujeres. Y después porque en realidad, no es él quien utiliza a los demás, sino el utilizado. Y de esa manera, él es quien acaba siendo abandonado despues.
Posteriormente, el protagonista descubrirá que en realidad ligar no es tan complicado, ya que todo se basa en una sencilla premisa: Si alguien no tiene hambre, le puedes poner los mejores manjares que no probará el festín. Si alguien está hambriento y le das de comer, comerá. Si encima, está hambriento y le pones un buen chuletón delante, lo devorará. No hace falta que el chuletón (o la hamburguesa si es el caso) haga nada. Y no olvidemos que el chuletón no devora, sino que es devorado, y puede ser escupido si no demuestra ser de suficiente calidad cuando quien se lo come se haya saciado.
Analizo el final en el spoiler.
Decir que aunque tiene un nivel de escenas de sexo explicito algo superior a la media de las películas americanas, no sorprendería a nadie si fuese una película española. En el cine español, se hacen escenas mil veces más explicitas y en películas a menudo ni tan solo catalogadas como para mayores de 18 años.
Para concluir, es una película sencilla, para pasar un ratillo sin mayores aspiraciones, pero puede ser entretenida si os parece interesante los temas de fiestas, lujo y relaciones personales.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ochentero
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