Senderos de Gloria es una de las mejores películas de Kubrick, quien tiene una amplia y espléndida cartelera con varias obras maestras como es en este caso.

El film podría resumirse como una crítica a la guerra en general, aunque trasciende mucho mas allá. El film tiene un argumento sumamente sublime. Las actuaciones son todos perfectas y se complementan una a la otra. Tanto la narración y la fotografía son de una calidad sobresaliente. Con ella podremos disfrutar de una maravilla visual, donde podremos ver todo lo que la guerra, en su enorme miseria, nos ofrece: muerte, miseria, ignorancia, exceso de poder, traición y sufrimiento. De esta forma nos sumergiremos en una tensión agobiante en la que nosotros seremos un soldado más, que deberá morir sin una razón o causa justa.

Es innegable el talento que poseía Kubrick apenas en el año 1957 sin ningún tipo de medio como los actuales. Y ni con el dinero que hay ahora, los efectos de computadora y todo lo que quieran nunca podrán suplantantar a un genio y uno de los más grandes directores de la historia.