La primera vez que vi esta serie pensé que era una serie rarísima, con dibujos realmente feos, e incluso pensé que sería una de las peores series. La verdad es que ese día ni siquiera me puse a verla durante 5 minutos.
Una o dos semanas después, haciendo zapping, vi que la echaban y me puse a verla para reírme de lo mala que era, pero lo que pasó fue que me reí bastante CON la serie y no DE la serie.
Sólo hay dos personajes, el humano y el perro, son fijos, y en cada capítulo aparecen otros alocados y muchas veces absurdos personajes que sin duda te hacen pasar un buen rato.
La verdad es que tiene un humor bastante absurdo y me he dado cuenta que los dibujos están así de mal hechos con el propósito de que las situaciones sean más absurdas y divertidas aún.
El único fin de esta serie es hacer reír y entretener y nocreo que haya moraleja en ninguno de sus episodios y creo que su humor se asemeja al de Padre de Familia, pero orientado a un público infantil.
Desde luego esta serie me ha demostrado que las apariencias engañan y que no hay que juzgar una serie o película sin terminarla de ver.