Raya y El Último Dragón

A lo largo de su trayectoria la casa Disney nos ha ofrecido gran cantidad de historias y entretenimiento. Unas con más calado, otras mejores y otras peores, pero la esencia se mantuvo ahí. Su última propuesta tiene una base sólida, un sector bien diferenciado al que va dirigida y recupera ese tono de siempre que se había dejado de lado en las últimas películas. Pensar en Disney es pensar en nuestra niñez, en nuestra infancia, y ésta cinta es un poco eso.

La historia transcurre en el mundo imaginario de Kumandra, pero podría pasar por cualquier país oriental del presente. En él viven en armonía los humanos y los dragones, hasta que sucede algo y todo queda separado. Es una trama sencilla y previsible, las cosas como son. Está cortada por el mismo patrón que muchas otras, es cierto, pero el viaje y el mensaje es lo importante aquí. Todo el proceso de ir buscando las gemas por las diferentes tierras me ha parecido brillante.

Los personajes están bien, aunque creo que les ha faltado un poco más de profundidad. Después de verla te quedas igual, no transmiten gran cosa, son del montón. La dragona es de lo mejor de la cinta, eso vaya por delante, sacándole el partido que se merecía. Me hubiera gustado ver más trasfondo en el prólogo y la simbiosis que nos cuenta, pero bueno.

No sin olvidar la parte más llamativa de la película: La animación. Es excelente. Mientras la estás viendo te sorprende lo bien hecha que está, tanto que, a ratos, parecen imágenes reales. El techo técnico está un peldaño más arriba si cabe, haciéndose difícil de superar a día de hoy. Junto a ''Soul'', es el mayor despliegue técnico en una cinta animada hasta el momento. Increíble trabajo.

En resumen ''Raya y el último dragón'' es una película destinada para toda la familia, donde los más pequeños disfrutarán tanto como nosotros en su época. Cumple todo lo que prometía y deja buen sabor de boca tras su visionado. Si algún día se animan a continuar la historia a mí ya me han ganado. La recomendaría.

Lo mejor: Una calidad técnica excelente, es entretenida, el viaje y el mensaje que transmite.
Lo peor: El final es bastante previsible.

* Un 7 *

Interesante y divertida película de Disney que nos adentra en una historia que en un principio pensaba que iba a ser lo mismo de siempre, pero para mi sorpresa resultó tener su propio mérito. Un poco rara a veces, y eso me parece fascinante.

Imaginen, tenemos una chica de estilo asiática que domina artes marciales, y eso me recuerda inevitablemente a Mulán, más, sumándole el hecho de que recientemente hemos visto la live action (imposible de no pensar en ella y su aburrida trama). Tenemos dragones y la necesidad de rescatarlos, lo que sin lugar a dudas, me hace memorar a “Cómo entrenar a tu dragón” (que además tiene varias partes). Pero de alguna manera logran hacer una historia nueva que si bien no es el último tesoro escondido, realmente funciona bien, y entretiene. Al final, es lo que una peli de niños tiene que tener y pese a todo lo que se pueda argumentar, es original.

Cuando hemos visto demasiado cine, ya nada nos parece diferente, y si, podemos encontrar clichés de Disney, pero es una historia nueva y tiene méritos de su propio peso. El personaje del dragón resulta ser algo raro, curioso, tiene alguna manera diferente de abordar las temáticas, que para algunos puede resultar todo un desastre, pero para otros resulta novedoso y divertido. No se siente forzado el tema de que todos los personajes centrales sean femeninos, no se echa de menos que no tenga ninguna trama romántica, aunque de alguna manera, el sentido de afecto se extrapola al amor a los dragones y a la familia.

En fin, vale la pena. Quita el mal sabor que nos deja ver tanta live action que repite lo mismo de sus antecesoras animadas y nos muestra una historia original (más o menos) y muy disfrutable visualmente. Y me hace recobrar el deseo de seguir disfrutando de futuras producciones de Disney, si mantienen este camino y siguen escribiendo cosas nuevas.

Película comercial destinada a ventas orientales que como siempre y en la linea Disney es asquerosamente correcta en cuanto a su política se refiere, disimulando cambios de estereotipos cuando estos son finalmente conservadores por mucho que me pongan personajes principales femeninos. El eje monárquico (aunque cambien de princesa a guerrera), el abuso de personajes secundarios carismáticos para dar vida a una protagonista muy sosa, el drama de la orfandad, el chiste fácil y un largo etc... El esquema de personajes es el mismo que todas las películas, a excepción de la incorporación de más secundarios y el cambio de género en el rol protagonista-antagonista, pero sigue siendo lo mismo. Los villanos principales no son realmente villanos, son ese registro de bueno-malo que posee un conflicto interno no resuelto hasta el drama final y el verdadero mal de la cinta (los seres oscuros) no se desarrolla en nada. Ni que decir los dragones que resultan dolorosos estéticamente hablando. Destacar la magnífica labor de siempre: la banda sonara, la animación (aunque sea cada vez más monótona) y el ejercicio imaginativo que en este caso, es bastante pobre.

A nivel emocional los personajes no tienen agarre y sus conflictos personales son de plástico (como el merchandising), me explico: se intenta dar un dramatismo a personajes bastante planos que rompe el equilibrio emocional de la película. Cumple en entretenimiento para los más pequeños pero no sorprende y lo peor, adoctrina monopolísticamente a la nueva generación de niños rata en la falta de sentido crítico.

Nota:5/10

Alfonso J.

Muy entretenida y conmovedora aventura épica que gustará a niños y adultos.

Raya es una heroína colmada de valentía, fuerza y esperanza. Ella deberá salvar a su hogar de una extraña fuerza maligna que destruye todo a su paso. Por supuesto, contará con la ayuda de unos entrañables personajes secundarios.

Con una animación impecable y llena de colores, se expone un mundo fragmentado por los humanos; donde el poder de la confianza y la unión serán el motor que mueva el desarrollo de la historia.

Los personajes son punto aparte. Todos están muy bien desarrollados y eso se nota porque importa mucho lo que les pase. Los niños disfrutarán al verlos y los adultos lograrán identificarse con más de uno.

Hay varios mensajes potentes en la película. Probablemente el más importante sea el valor de la confianza. Básicamente, Raya y el último dragón, expone que todavía se puede tener fe en la humanidad.

Disney debería considerar realizar más historias originales como ésta. Agota ver remakes de los clásicos en live action o segundas partes. A veces el riesgo es mucho más provechoso que la zona de confort.

Buena.

Cuando te ves obligado a sacar un producto cada año, llega un momento en que se pierde originalidad, frescura y caes en rutinas y lugares comunes.
Tenemos muchos ejemplos; en el mundo de los videojuegos, con sagas anuales como Call of Duty o Assassin's Creed, que se han convertido en un corta/pega sin alma, en un cambio de "skin" y a tirar pá lante.
Le pasa a Pixar, aunque aquí abriré un pequeño paréntesis:
Es cierto que la Pixar de ahora no le llega a la suela de los zapatos a la Pixar de hace años, pero al menos todavía sacan maravillas como Del Revés o Soul de vez en cuando que nos hace olvidar la triste realidad: que hasta ellos muestran signos de agotamiento.

Y es agotamiento lo que veo en Raya...bueno, eso y otras cosas más.
Raya comienza como un capítulo de The Last Airbender pasado por el filtro de Clan TV.
Me gusta lo que veo aunque no me apasione. James Newton Howard ha hecho un grandísimo trabajo con la OST, todo hay que decirlo. Todo va medianamente bien, hasta que aparece una dragona que habla......y empieza el descenso a los infiernos.

La película se convierte en un chascarrillo continuo, en una suerte de comedieta mil veces vista, con un personaje (la susodicha dragona) que me parece anodina y cargante.

Y esto ya no es una película, es un videojuego en el que cada búsqueda de la protagonista parece una fase que tenemos que pasar, pero está en modo fácil, ya que no hay peligro ni tensión ni nada de nada...todo es monótono, estudiado hasta el milímetro, no hay el menor atisbo de aventura.
Es rutinario, sin alma, soso, así como todos sus personajes secundarios y los "villanos"...sosos, sin alma y rutinarios.

Raya me parece una de las películas más prescindibles que ha realizado Disney en años. Parece sacada con prisas, para llenar la cuota anual, y se nota. No hay riesgo, no se intenta nada nuevo, nada osado...todo va sobre railes, tópico tras tópico, cliché tas cliché.
Su visionado irradia pereza, hay momentos en los que voy 10 minutos por delante de la película de lo predecible que es....y si, ya se que esto no lo dirige Kurosawa, ni Lynch, ni Ford, ni Jarmusch ni Fellini, no soy imbécil, se lo que iba a ver, pero aún sabiéndolo me ha parecido terriblemente sosa.

Un saludo.