En otro país

El surcoreano Hong Sang-soo (1960) es sin duda uno de los nombres que más suenan últimamente cuando se habla de los directores de cine de autor actuales más importantes del globo.

In another country es su primera película que ha llegado a los cines españoles, en gran parte debido a su proyección en la sección oficial de largometrajes en el Festival de Cannes de 2012 así como el rostro de Isabelle Huppert como protagonista de la cinta. Por otro lado, su más reciente Nobody's Daughter Haewon presente en la Berlinale de 2013, parece que de momento no va a ser posible disfrutarla en la gran pantalla.

La película que nos atañe contiene los rasgos característicos de su cine centrado en la construcción de unos personajes que se encuentran en un periodo de sus vidas en los que están absolutamente perdidos, siendo torpes con sus relaciones con los demás, coqueteando con el alcohol y el sexo en un intento de reubicarse y seguir adelante.

Los diálogos van de los transcendental a los superfluo, como en la vida real. Los planos secuencia como en las escenas del restaurante desprenden verosimilitud. La puesta en escena es minimalista, naturalista, evocando una realidad costumbrista rota por unos zooms que demuestran la artificiosidad de lo que se está realizando.

Y es aquí donde reside la importancia de esta película. El alterego de Sang-soo, la joven escritora, relata tres historias con los mismos protagonistas cambiando algunos aspectos de sus vidas y sus relaciones pero no su esencia. Este trabajo estilístico no es sino la vida misma del propio director, el cual confiesa en una entrevista en la revista So Film que cuando inicia un rodaje, su guión no tiene más que 30 o 40 páginas y que por las mañanas se dedica a reescribirlo y añadir aquello que le parece adecuado grabar en una localización determinada. El personaje del director en la película afirma querer grabar una película sobre el lugar, y que una vez grabada entenderá su significado. Así trabaja Sang-soo.

No importa el orden, no importan las motivaciones, no importa quien es quien, es todo un macguffin, él quiere contar una historia, sobre unos personajes, en un lugar determinado, cualquiera de las tres historias sirve, o más bien dicho, las tres son necesarias, pero no sólo estas tres, podrían ser otras tres, es lo de menos, lo importante en su estilo, su sello, lo que Sang-soo nos cuenta y cómo lo cuenta. Y eso es de lo que trata el cine de autor.

http://cinemonogatari.blogspot.com.es/2014/04/da-reun-na-ra-e-suh-in-another-country.html

Parece ser que hoy en día basta con ser coreano, iraní, armenio o de algún otro país insignificante culturalmente para que cualquier bodrio que produzcas sea aclamado por la crítica erudita como interesantísima obra de arte.
El bodrio éste, que como bien apunta The Guardian, parece haber sido en una servilleta una tarde de borrachera entre un par de estudiantes, no de cine, sino de la ESO, no aporta nada, no explica nada, no conmueve nada, no divierte nada, y aburre mucho. No solo por repetir la misma historia tres veces, con írrelevantes variaciones, es que una sola ya aburre.
Las dificultades idiomáticas añaden un plus de estupidez al conjunto, resultando unos diálogos de la profundidad y matices que puede desarrollar un alumno de "aprenda inglés en 2 semanas".
La señora Huppert pasa por ahí como diciendo a mí me pagan por decir esto y yo lo digo, aparte que tiene edad ya para hacer papeles de abuelita marchosa y no de amante apasionada.

“In Another Country” es una película dirigida y escrita por el reconocido director surcoreano Hong Sang-soo. Es una película muy simpática, una comedia dramática que mantiene muchas de las características de este curioso director. Sencilla, atemporal, bella y triste. Otra de las pequeñas pero valiosas joyas del año.

El filme tiene un tono muy indie, bastante sencilla. Pero el director juega con los tiempos y la estructura narrativa. Desde la idea de que sea uno de los personajes la que narre y construya la historia principal, hasta los mismos cambios y mezclas de tiempos dentro de esa historia.

Esa mezcla y todo ese experimento tienen un resultado muy positivo. En las tres historias se mezclan situaciones dramáticas con muy buenos toques de comedia. Creo que lo más destacado es el guión, muy interesante y curiosamente estructurado.

Durante todo el filme se trasmite un ambiente de tranquilidad, logrado por los hermosos paisajes, la música de fondo y los curiosos movimientos de cámara del director con acercamientos repentinos, que al inicio rechacé pero terminaron gustándome mucho.

Las interpretaciones, aquí la protagonista total, es esa mujer francesa que pasa de ser directora francesa, a una mujer infiel y finalmente a una mujer desgraciada y divorciada de un magnate coreano. Esa mujer, es interpretada por la gloriosa actriz francesa Isabelle Huppert, que en la mayor parte del filme se amolda y se apropia de cada uno de los personajes, trasmitiendo mucha naturalidad con la excepción de uno de los momentos, en la segunda historia. Del resto, todos correctos.

En cada historia inventada por la joven, toma elementos de su propia vida, de la que nos enteramos precisamente al inicio del filme, cuando esta discute con su madre de sus problemas.

En síntesis, un filme muy agradable y divertido. Una pequeña joya y creo que una de las mejores comedias del año.

7.5/10

http://asbvirtualinfo.blogspot.com/2012/12/in-another-country-hong-sang-soo.html

No es mi tipo de films preferidos, las actuaciones son muy naturales pero el uso brusco del zoom rompe o contradice un poco con esa naturalidad. Pensando la película desde la producción y teniendo en cuenta que los actores seguramente interpretaron diferentes papeles de corrido en cada locación o puesta en escena, se pueden destacar bastante las actuaciones.

Hay una bajada de línea a los koreanos del sexo masculino que quedan estigmatizados como unos choborras, jeropas y sin tacto para iniciar una relación (o mejor dicho con el tacto de un pibe de 8 años) en las 3 historias y hasta en el argumento que inicia estas historias.
Por otro lado el juego (o no juego) entre los diferentes lenguajes no llega a ser muy interesante desde los diálogos.
Sobre el final de la película me quede esperando saber que paso con el argumento principal... un misterio sin resolver.




Dato de color: hay un socorrista costero en una costa donde el agua le llega a las rodillas (a pesar de esto se las arregla para nadar crol jajaja ) y en la cual la gente no se baña porque hace un frio de recontra cagarse, sin dudas este es el personaje más interesante de la película.

La película aunque es bastante sencilla, sin nada novedoso, te aporta incertidumbre de la relación existente entre todas las historias.
Es una pena que la historia inicial, de la familia con problemas económicos nos quedamos sin saber nada de ella, personalmente me hubiera gustado saber algo más de ella. Pero el director ha decidido que la hija se convierta en narradora y guionista, decidida a escribir esas tres historias que serán finalmente las que vemos.

Cada una de las historias dura 30 minutos, antes de comenzar la escritora te da pistas de que son historias totalmente, aunque siempre te queda la duda si hay relación entre las historias y siguen un orden determinado. Esa confusión viene dada por los nombres de los personajes, ya que tanto Anne como Jong Soo se llaman igual en todas las historias. El director nos ha intentado contar como algún pequeño matiz puede cambiar la situación de las personas, así como poner en juego la infidelidad, el engaño e intentar adelantarse a las situaciones. Todo esto no se muestra de forma explícita, sino que lo tienes que descubrir tú por pequeños cambios, como ese pasatiempos en donde tienes tres imágenes muy parecidas y tienes que encontar la diferencia.
Esas pequeñas diferencias entre las historias me gusta, pero me hubiera gustado más que esas tres historias hubieran tenido relación, siendo las mismas personas pero en épocas diferentes. Esto último requiere guión muy trabajado, para que no haya errores- ver el cine de Iñarritu, que usa magistralmente esta técnica, mientras ha contado con el guionista Guillermo Arriaga-.

La presencia de Isabelle Huppert aumenta la calidad de la película, dando a su personaje a priori parecido un toque totalmente diferente en cada historia.
También me gusta cuando los habitantes de Mohang hablan en coreano, Huppert no les entiende y la interpretación suya en este momento de escucha es muy buena. La película es indispensable verla en v.o.s, porque hay conversaciones que no tendrían su lógica, en donde mezclan inglés y coreano. Lo bueno de esta película es que normalmente esos momentos en que hay una persona en otro país y no entiende el idioma, se aprovecha para hacer bromas o acudir a unas situaciones cómicas que suelen ser forzadas, en este caso simplemente se cuenta la realidad tal como es.

A nivel visual se desaprovecha ese paisaje tan bonito al lado del mar, para no presentarnos ninguna imagen especial, quizás este aspecto no le interesaba al director, pero para mí es una gran decepción. Simplemente alguna escena desde la habitación del hotel en donde vemos la playa con las montañas que la rodean, pero creo que sin buscar ningún enfoque especial.