Vuelo 93

Enhorabuena a Greengrass por enfocar el tema con seriedad y lograr que los últimos 20 minutos de su película tengan más tensión que todo el cine norteamericano del último lustro junto.

Enhorabuena a los productores, que tuvieron las pelotas de poner dinero en algo tan arriesgado y anticomercial.

Enhorabuena a los actores, desconocidos que dan lecciones de naturalidad ante la cámara a Cruise, Pitt y sus compañeros.

El punto negativo: tal vez las escenas ambientadas en las torres de control resulten difíciles de seguir para cierta parte del público, pero transmiten a la perfección la realidad de un lugar así y el caos que se experimentó aquel fatídico día.

Película carente de sensacionalismos, intensa e hiperrealista.

La última película de Paul Grengaas no tenía, al comienzo, mi apoyo mutuo, debido a que estas películas me parecen para aprovechar el tirón de una catástrofe demasiado dura para el público (la historia de los pasajeros de uno de los aviones secuestrados el 11-S), además de que, seguramente , recaería en la lágrima fácil. Pues bien, ya vista he de deciros que me ha parecido todo lo contrario: Grengaas narra la película como si fuera un documental y como si realmente fuéramos uno de ellos, y nada más lejos de la realidad, somos todos y cada uno de ellos por que así es como nos sentimos cuando vemos la película. Por que United 93 va más allá de lo que parece:la historia del avión no es nada mas y nada menos una visión del mundo, de que aún hay gente con agallas para parar estas tragedias; y todo lo acontecido en la central militar y el aeropuerto, a pesar de que pueda perderse más de uno ,consigue reflejar el miedo y el caos que vivieron en ese momento de forma harto realista ( ¿ qué habriamos hecho en su lugar ?). Los personajes son completamente humanos, y están interpretados por desconocidos, lo que da realismo a la propia película ( además, huye de efectismos, pero aún así consigue que estallemos en lágrimas ), y la música ( de John Powell ) consigue pasar desapercibida durante la mayor parte del film ( es más, no te das ni cuenta hasta los últimos e impactantes 10 minutos ). En mi opinión, la primera película del 11-S se ha convertido en la mejor película del año y que, sin quererlo ni beberlo, será probablemente la mejor visión que se realizará sobre estos hechos. Una película necesaria y obligatoria

Excelente adaptación de Greengrass (“Bloody Sunday”, “El mito de Bourne”) sobre los trágicos acontecimientos sucedidos el 11-S. Sin meterse apenas en sentimentalismos baratos a lo “Wold Trade Center” ni mostrar el suceso desde ningún punto de vista ni persona específica, el director muestra la realidad tal y como se pudo vivir en el interior del Vuelo 93, de United Airelines, el único avión que no consiguió su sanguinario objetivo. El filme se divide entre la situación de incomprensión de las torres aéreas de control y el interior del aeroplano, donde se fraguó la rebelión de la tripulación contra los terroristas. De los mejores metrajes del año y, sin duda, uno de los más terroríficos. Ya se sabe, no hay nada superable a la triste realidad.

Digo esencial, básica , por que es la mejor y mas acertada, mas valiente y mas descriptiva en todos los sentidos sobre aquel día..
He visto varias veces sus tres películas en aquella década tan decisiva, confusa y determinante que son Domingo sangriento de 2002, esta de 2006 y Green zone de 2009. Es muy significativo también, que continuase la saga de bourne con acierto y después de dejarla, otros directores la continuasen con acierto, tanto Domingo sangriento como especialmente Green zone , sin abandonar el tono documental y ser una película de acción, denuncian las verdaderas razones de lo que sucedió realmente en aquellos años.
Por eso, goza de mi admiración y mi respeto, pues, los que superábamos el cuarto de siglo en 2001 lo sabemos, un manto de de vacio informativo, miedo velado y confusión fue la tónica habitual en la primera década de este milenio.
Por eso Paul Greengrass me merece tanta admiración, no solo como cinéfilo, que para mi, es un peliculón, y que no me canso de ver, aunque me duela y sobrecoja como una herida que continua abierta como aquel martes maldito.
en aquel 2006 le echó un par para hacer una película tan realista y desmarcarse del patrioterismo plomizo y fácil que siguió Oliver Stone con su versión de aquel día, la critica no la recibió bien del todo, e incluso algunos la minusvaloraron criticando su visión desde el punto de vista de los controladores.
El tiempo ha dado la razón a el director y su enfoque en general para describir para la posteridad sobre como se desarrollaron los acontecimientos y como fue desde el punto de vista de los pasajeros , los militares, los controladores,etc.
Creo que es la mejor y pienso que así la concibió con acertadísima visión para la posteridad como punto troncal el vuelo que iba al capitolio y que los pasajeros que impidieron un cuarto estrago, como testimonio para la posteridad que los totalitarismos siempre tendrán enfrente una resistencia.
el mismo reconoce que los actores improvisaron, y que siempre piensa en ello y le obsesiona el final.
fue nominado a mejor montaje y director, mereció ganarlos.

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...pero todas ellas eran infundadas. Quien dijera que era demasiado pronto se equivocaba, quien la calificaba de comercial y oportunista volvíase a equivocar...sin duda United 93 se podría calificar de una de las películas más dramáticas de los últimos años (teniendo en cuenta que son hechos reales).

Además Paul Greengrass hay que decir que se luce...es un guionista y director excelente como ya dejó huella de ello en Bloody Sunday. En todo momento nos enseña la humanidad de esas personas tan diferentes pero que pronto tendrían algo en común; cada una de ella con sus preocupaciones, sus deseos, sus amores...pero sobre todo su vida, una vida digna de ser vivida. Desde el primer instante nos comprometemos con estas personas, con su terror, su angustia y su pánico...pero finalmente con su valentia y sus ganas de vivir. Desde el primer momento (incido), nos muestra el desconcierto, el NO saber hacer y la inoperancia del país más poderoso del mundo y sobre todo de su "gran presidente", que una vez más hizo gala de su saber estar al decidir lo que se debía hacer al cuarto de hora de estrellarse todos los aviones.

Sin duda la película consigue lo que se proponía desde un primer momento: estremecer y honrar la memoria de todas las personas inocentes que perecieron en aquel martes negro de la historia de la humanidad.