Prom Night II

Una buena continuación para Prom Night. En vez de continuar la saga con un slasher que hubiera tenido poco sentido para quienes hayan visto la primera parte, la productora decidio incorporar en la saga el personaje de Mary Lou, todo un acierto ya que es un personaje con carisma de los que sueltan un chiste antes de matar (tal como le ocurre al personaje de Freddy Krueger a partir de la tercera entrega, que se estrenó el mismo año que ésta, o el personaje de Angela de Campamento Sangriento, quien desarrollaría una faceta muy parecida a Mary Lou a partir de la segunda entrega el año siguiente). Aunque si hay una influencia clara y directa de la que bebe Hello Mary Lou es, sin duda, Carrie de Brian de Palma, con un desenlace casi idéntico metido dentro de una trama de espiritismo, apariciones y alucinaciones.
Unos efectos muy elaborados, una fotografia onírica donde abundan los focos rojos, lilas y azules y la genial interpretación de Michael Ironside hacen el toque final de esta película que crearía un gran personaje que daría continuación a una muy buena saga que no tuvo el éxito que se merecía.

Genial slasher sobrenatural de venganza que cuenta con todos los elementos para ser un clásico del género: una buena historia, aunque algo simple y que va directa al grano, actuaciones más que decentes, montones de víctimas, y unos efectos especiales ochenteros tremendamente bien hechos, que te ayudan a disfrutar el ya de por sí buen rato que estás pasando.

Es de las poquitas películas en donde las alucinaciones no me han molestado para nada, acompañan perfectamente a la acción y no pierdes el hilo.
Personalmente, me ha gustado y bastante.

Modesta pero simpática peliculilla de terror para adolescentes ochentera que copia sin rubor alguno múltiples elementos de "Carrie" y "Pesadilla en Elm Street" y que se vendió como segunda parte de una película (la "Noche de graduación" original) con la que en realidad no tiene ninguna relación.

Va el tema en esta ocasión de una chica que muere en 1957 antes de llegar a ser coronada reina del baile (la Mary Lou del título) y vuelve 30 años más tarde para desquitarse, tomando para ello posesión del cuerpo de la moza más pazguata y sosainas del instituto. La principal gracia de la película es el contraste entre el carácter explosivo de Mary Lou y la sosería de la pánfila que le "presta" el cuerpo, que da lugar a alguna que otra situación divertida y/o macabra. A mayores hay un par de desnudos bastante agradecidos (uno de la chica rubia sobre todo), alguna línea de diálogo graciosa, un par de muertes imaginativas (la del vestuario sobre todo), y algún momento raro un poco inquietante (el beso con el padre, el caballo de juguete, la coronación), pero el ritmo es muy irregular, el gore brilla por su ausencia, las alucinaciones de la chica poseída parecen una versión cutre de las peores secuencias de Freddy Krugger, y el personaje de Mary Lou tarda demasiado en poseer a la chica y poner la cosa un poco interesante.

Se deja ver, pero no es para tirar cohetes tampoco ni mucho menos.

Como curiosidad, dos de las chicas se apellidan Carpenter y Henenlotter. Y en los créditos vemos también a unos tales Sr. Romero, Sr. Craven o Sr. Browning. Conocimientos del género, por lo menos de la teoría, se ve que tenía este tal Pittman.

Mención aparte merece el final, que...