Papás con honores

Por azares de la vida se me ha ocurrido probar suerte con esta comedia exclusiva de Netflix, producida por Adam Sandler (capaz de lo mejor pero también de lo peor) y protagonizada por su buen amigo David Spade, que en Estados Unidos es bastante conocido, pero aquí nos suena vagamente por el díptico de “Niños Grandes”.

Pues bien, a pesar de tener muchas películas y series pendientes, me apetecía una comedia y tenía curiosidad de ver que podía salir de esto. La verdad es que la película no engaña a nadie, ya que los responsables son los que son y la sinopsis ya te lo dice todo. Vamos, que sabía dónde me metía.

Eso no quita que no se pueda criticar el producto que nos ocupa, ya que es una bobada sin pies ni cabeza, con un guion (por llamarlo de alguna forma) insulso, y que sólo tiene un par de momentos inspirados, siendo unas de las comedias más estúpidas (en el mal sentido) de los últimos años.

No me voy a meter en la dirección, ya que, aunque tampoco es mediocre, no se puede destacar nada de ella. En cuanto al guion, lo dicho, muy lamentable. La película es una sucesión de sketches y situaciones supuestamente divertidas, donde uno se queda expectante de ver que personaje es más estúpido (curiosamente, los que hacen de padres se llevan la palma y los hijos salen mejor parados). Eso es todo.

No hay un hilo conductor y todo es tan caótico que ni siquiera hay un final en la historia. Está claro que el objetivo de la película es hacer pasar un rato divertido, sin complicaciones, pero no todo son golpes, caídas o chistes escatológicos. Por ejemplo, el momento más inspirado de la cinta es un comentario de uno de los protagonistas sobre su daltonismo. Ese humor es el más divertido, pero desgraciadamente la película prefiere ir a lo fácil.

La película está repartida en cuatro tramas. La del padre perdedor, la del padre perdedor que no quiere que se sepa, y la de sus hijos, uno que no sabe qué hacer con su vida y otro con una trama romántica que se deja ver, pero realmente no va a ningún lado.

David Spade es el gran reclamo y cumple como personaje bizarro y excéntrico. Se le da bien hacer ese tipo de papeles, pero repite algunos ticks de su actuación en “Niños Grandes”, donde tiene un personaje muy similar. Se le ve entregado y suyos son los momentos más divertidos e hilarantes del film. Poco se puede decir del resto del reparto, ya que hacen lo que pueden.

En conclusión, estamos ante una tontería, sin sentido alguno, pero si te gustan este tipo de productos, disfrutaras como un enano. Yo me he reído un par de veces, pero me ha quedado la sensación de estar ante un producto perezoso y vacío, que no tiene razón de ser. Vosotros mismos.

Lo mejor: Algún gag suelto y la entrega de Spade.

Lo peor: Todo lo demás.

Más críticas: ocioworld.net

La otra noche me apetecía echarme unas risas y verme una comedia decente , vi estrenada este titulo y parecía que iba a ser una película tronchante.Pero cuándo la comenze a ver cada vez se hacia más estúpida y absurda la trama cuyo argumento carece de sentido , si es verdad que tiene algún golpe de humor al principio pero nada que pueda defender la comedia de Spindel que se cae a trozo

Yo al ver el trailer me esperaba algo regular y al verla pensaba que iba a mejorar pero lo siento no pude. Me pareció muy mala.
"El Padre Del Año" es la nueva película de Netflix que nos llega.
La actuación de David Spade es buena pero mejorable. Jackie Sandler la esposa de Adam Sandler trabaja en esta película así que me imagino que Adam Sandler es el productor.
Volviendo a la película, no me gustó. Como suelen suceder en las películas de Adam Sandler comedia adulta eso no tiene nada de malo pero el tema es la trama y la película pudo haber sido mejor.
En fin, muy mala porque no hay ceros.

Para mí sorpresa, voy a decir que la idea tan ESTÚPIDA de dos padres que como reto se plantean pegarse porque sus hijos han hecho una apuesta, podría dar con una película bastante sarcástica y de una comedia negra sobre el primitivo aspecto del ser humano masculino.

Desgraciadamente, esta película evita a cubierto todo esto. Lo cuál duele porque estoy seguro que alguien podría sacar oro.

En vez de esto, las bromas típicas de películas de Sandler. David Vs Goliath, personajes exagerados y diametralmente opuestos, tramas ridículas y una historia que además se pierde pues se supone que podría ir sobre la paternidad y acaba siendo más la historia de uno de los chavales jóvenes.

Ni un ápice de interés ni nada diferente. Es lo de siempre con esta gente. Eso y un David Spade poco inspirado.

Poquita cosa con una idea que reitero, uno cree que podría haber dado para más.

Y no, no es graciosa.