Psychokinesis

Hace dos años tuve el placer de disfrutar de Train To Busan, un melodrama terrorífico con zombis de por medio que con ingenio y adrenalina lograba el director Yeon Sang-ho una cinta novedosa y fresca dentro del género sin excederse en el gore como algunos tienen por costumbre sino fortaleciendo las relaciones entre los personajes y con mucha honestidad y sencillez. Ahora toca un género actualmente en pie de guerra pero esta vez Yeon no recurre a los convencionalismos pese a las similitudes que pudiera haber con El protegido y Chronicle. Los poderes psíquicos no se explican en profundidad, pero ya no es el porqué ni el cómo sino el dónde y el cuándo que ocurren en el momento más desolador de una familia sur coreana. Un padre de familia con problemas económicos con su hija, desahucios de por medio todo a través de una fabulosa crítica social y económica en Corea del Sur. Los poderes no son más que una excusa para explicar el contexto a modo de sátira y desarrollar algo en común con la anterior cinta citada de zombis, la relación paternofilial. La cinta va más allá de los poderes y la acción, que también tiene buenos efectos, sino que acaba siendo un melodrama sobre dilemas morales, y es un puñetazo de realidad con sabor agridulce para lo que realmente parece pese al abundante uso de la comedia a la hora de usar los poderes nuestro divertido protagonista. El director plasma varios temas de manera efectiva y puede conmover como divertir para culminar en una cinta aceptable, rompiendo algún que otro molde y aunque no sea tan arriesgada, desgarradora e impredecible como Train to Busan es una cinta a tener en cuenta porque tiene más profundidad de la que el resto de la gente no parece valorar. Obviad las críticas y disfrutad.

Película simpática, pero irregular en su estructura que no consigue del todo elevarse de ciertos vicios frecuentes el el cine coreano. La firma Yeon Sang-ho el director de "Train to Busan" una obra maestra inigualable. Netflix la adquirió para su catálogo del 2018, y aunque es entretenida no me resultó memorable. Una lástima, porque tenía con qué convertirse en una de superhombres que trascendiera, sobre todo en esta era de cine flojo, carente de contundencia, buen hacer y sobre todo buen contar una historia que emocione.

Para destacar sus efectos digitales muy bien conseguidos, que sin embargo ya no sorprenden a nadie. Buena fotografía, pero música espantosa.

Después de que Yeon san ho nos trajera la magnífica "train to busan" no nos podíamos perder su nueva peli. La cual lo primero que me ha recordado es a animes/mangas como Inuyashiki o Gantz, osea a una influencia de Oku hiroya. Se queda un poco corta dadas las expectativas que tenía. Y unos efectos visuales muy conseguidos dadas las limitaciones que tienen.
No llega al nivel de su ópera prima pero hay que seguir viendo los que nos va trayendo.

Tras la Magnífica ¨Train to Busan¨, iba a ser difícil repetir el éxito… y así ocurre.
Este filme tiene otro tono. Es ciencia ficción con tintes de comedia, y una historia con corte de drama social.
Su alto presupuesto es notorio, toda la puesta en escena, todo indica que se le dio carta verde a este proyecto.

Sin embargo, esta película de corte familiar, se hace larga por sus momentos de diálogos y situaciones innecesarias de absoluto aburrimiento, y que no conducen a nada, más que agregar minutos a la historia.

Más dramas familiares, más la poca atención que llama este poder de mover las cosas con la mente, y la premisa de siempre: Entre más usa sus poderes, más se daña su cuerpo …
Pero es que ni eso es explotado. Ni el noble corazón, ni los villanos descafeinados, ni siquiera sus fxs o una villana que no dura más de 10 minutos en pantalla, logran salvarla. Deja un extraño sabor a que está inconclusa en todo aspecto…

La verdad es que es una historia tantas veces vista en cine y animé, que se queda en un intento que no fue.

Regular

Una cinta que mezcla unos cuantos géneros con acierto, es principalmente un drama familiar sobre la relación de un padre ausente y bastante desastre (como padre y como persona) que quiere a su hija, también tiene historia de drama social, ya que un grupo mafioso quiere desahuciar a la hija y a un grupo de gente de la galería comercial en la que trabajaban y tenían sus pequeños comercios, tiene toques cómicos y además un componente fantástico en el que ese padre adquiere poderes telekineticos.

El tratamiento que hace la película de los poderes, más allá de algún chiste puntual, es realista. No por recibir poderes una persona normal, más bien simple, y con sus fallos, va a cambiar de un momento para otro y convertirse en un héroe, en todo caso será la misma persona pero con poderes.
Y viviendo en sociedad existen más posibilidades de que esa diferencia te cause problemas o te perjudique a ti y a los que quieres de que te beneficien, en ese sentido todas las decisiones de la película resultan realistas y convincentes, aunque eso no sea lo más habitual en el género.

Las secuencias con efectos están bien planteadas y son adecuadas, aunque no llegan al nivel de imaginación y emoción del anterior trabajo del director Yeon Sang-ho en “Train to Busan”, con la que si comparte la trama paternofilial.

Una obra tan curiosa como interesante que no desarrolla de forma completa los temas que abre pero que trata bien los detalles y la historia mientras los desarrolla y funciona bastante bien en general.