La montaña trágica

"La montaña blanca", un pico del macizo del Mont Blanc donde el padre de Carla Alton (Alida Valli) desapareció cerca de la cumbre - antes de la WW II - cuando intentaba ser en el primero en escalarla, expedición en la cual también iba ella y que desde aquel fatídico día la mantiene con la obsesión de conseguir llegar a la cima (todavía sigue sin ser escalada por humano alguno).

Con la guerra recientemente finalizada, Carla vuelve a ese pueblo al pie de la montaña con la intención de llegar a la cima y acabar con esa enfebrecida obsesión que la embarga, para lo cual reune un grupo de 5 personas más y así conformar una expedición con probabilidades de éxito, Andreas (Oscar Homolka), un viejo amigo de su padre que no duda en seguirla, Nicholas Radcliffe (Cedric Hardwicke), un geólogo ingles motivado por los hallazgos que pueda encontrar en esa naturaleza, Paul DeLambre (Claude Rains), un escritor en busca de esas musas que le tienen abandonado, Hein (Lloyd Bridges), un alemán con toda la pinta y comportamiento de nazi de manual que con el ascenso pretende autoafirmarse en esas doctrinas de superioridad aria, y finalmente Martin Ordway (Glenn Ford), un ex piloto que durante la guerra fue abatido por esos lugares, que ahora ha vuelto a ellos en busca de paz interior y que siendo el más escéptico con la presunta utilidad de subir una montaña, acaba enganchándose a la expedición, en principio para ganarse el amor de una Carla que evidentemente se muestra más que receptiva al cortejo; todos ellos con esas motivaciones anteriormente descritas, con las heridas no cerradas y recientes del horror de la guerra recientemente finalizada, y con la montaña como aglutinante de ese microcosmos a modo de retrato de los lodos del principio de la posguerra.

Sigue en spoiler por falta de espacio:

Tras la guerra, Carla regresa a su pueblo en los Alpes Suizos con la intención de escalar La Torre Blanca, montaña que nunca ha sido conquistada. En su anterior intento había desaparecido su padre, ya cerca de la cumbre. Forman parte de la expedición dos amigos de su padre, un viejo escritor en busca de inspiración, un norteamericano que parece más interesado en Carla que en la escalada y un alpinista alemán que tiene la intención de alcanzar la cima el primero.

A pesar de que la película nos obsequia con bonitos paisajes de montaña y secuencias reales de escalada, no es una gran película sobre alpinismo. Basada en la novela de James Ramsey Ullman, nunca sorprende o emociona. Se ve con agrado, pero sin entusiasmar.

Para empezar, los personajes no convencen por su físico. El guía, además de exceso de años, tiene un evidente problema de sobrepeso. Mas viejos y escasamente atléticos se muestran el doctor y el escritor. Solo falta Matusalén. El único que parece un alpinista de verdad es Lloyd Bridges. Y en ningún momento se da la impresión de una expedición largamente preparada y bien planificada técnicamente, como corresponde a una cima de dificultad máxima. Se van sumando a la aventura de manera improvisada, como si se fuesen al campo a tomar la tortilla.

En cuanto a las interpretaciones, destaca la belleza y vitalidad de Alida Valli y la mala leche de Lloyd Bridges. Al lado de estos, Glenn Ford, que parece más un oficinista que un escalador, interpreta un papel bien soso.

No está mal para entretenerse una tarde de domingo, pero me quedo con el realismo estremecedor de “Everest” (2015).

Se nota que es una película antigua. Posteriormente se han rodado otras películas sobre escaladores con mayor fuerza y con técnicas de filmación más modernas y espectaculares.

El trabajo de los actores es pasable. El argumento es bastante simple. Tampoco destacan los paisajes alpinos.

Pero se ve la película con cierta complacencia.

Película de aventuras y amoríos en una escalada a una montaña suiza. Cada uno de los intervinientes en la partida de escalada tiene una motivación distinta. La chica quiere escalar "La Torre Blanca" porque en ella se mató su padre; el americano escalador por el reto; el otro americano porque sube la chica y está enamorado de ella... El intelectual porque es un reto y no aguanta a su mujer. La montaña no ha sido escalada todavía, y los peligros que acechan hace que afloren las personalidades de cada uno de los participantes.
Tiene una temática parecida a "La Montaña siniestra" de Edward Dmytryk, de 1956. Parecida, muy parecida. Otra de alpinismo que me gustó mucho, aunque es otra temática la que se ventila es Cinco Dias, un Verano, de Fred Zinnemman, su última película de 1982. Otra de montañas es Licencia para matar (del mismo título que una de 007, aunque no tiene nada que ver) de Clinst Eastwood, de 1975.
El reparto es magnífico: Glenn Ford, Alida Valli, Claude Rains, Cedric Hardwicke, Oskar Homolka, Lloyd Bridges, June Clayworth, Edit Angold, Fred Essler, y Lotte Stein.
Del director ya he visto tres cosas y me gusta. Solvente, decidido, clase media. Gran director de fotografía que, como otros tantos en la historia del cine, aprenden el oficio y pasan al otro lado de la cámara.

La montaña trágica (1950) comienza con unos créditos iniciales: Los personajes y eventos representados en esta obra fotográfica son ficticios. Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, es pura coincidencia. Esta es una historia maravillosamente fotografiada que trata sobre la aventura en la montaña, la ambición y el ansia de conquistar las más altas cumbres. Incluyendo un elenco excelente con Glenn Ford y Alida Valli en el mejor momento de sus carreras. Rodada en los Alpes franceses, donde un grupo de personas de diferentes países unen sus esfuerzos para lograr su anhelado sueño: alcanzar la cima de la montaña más alta. Un equipo de montaña se reúne en los Alpes suizos para escalar y llegar a una cima nunca antes conquistada, mientras los montañeros revelando sus yos interiores en el proceso. La Torre Blanca, The White Tower, es una montaña parecida al Matterhorn en los Alpes suizos, nunca ha sido escalada en su máxima cumbre. El padre de Carla Alton, un famoso alpinista, murió en un lejano intento. Antes de la guerra, Alessandro Alton era un alpinista que sólo tenía una obsesión: alcanzar la cima de la llamada Torre Blanca, una montaña altísima, impresionante y monstruosa al mismo tiempo, situada en los Alpes suizos. Sin embargo, no lo consiguió y durante la expedición desapareció y lo dieron por muerto. Tras la guerra, su hija Carla (Alida Valli) organiza una subida a la misma montaña en homenaje a su padre. Para ello cuenta con dos viejos amigos: Andreas (Oskar Homolka), un guía del pueblo, y Nicholas Radcliffe (Sir Cedric Hardwicke), un geólogo británico, junto a un grupo de aventureros montañeros (Glenn Ford, Lloyd Bridges...) de distintas nacionalidades, que arriesgan sus vidas durante la expedición a los Alpes suizos. ¡Cada emoción jadeante en color de Technicolor!

Film de aventuras en larga escala que detalla la conquista obsesiva de la cima de una montaña, incluyendo escenarios espectaculares, imágenes impresionantes y manteniendo un buen grado de interés y tensión suficiente, tan bien como una agradable historia de amor. Bonita película llena de escenas nevadas con cuerdas y piolets, emoción, intriga; y, por supuesto, lucha por la vida a través de una arriesgada aventura montañosa. El hermoso escenario suizo bien rodado por camarógrafo Ray Rennahan no logra compensar por completo una gran cantidad de escenas en lento movimiento. La verdadera naturaleza de cada persona se revela a medida que escalan la cima, que otros escaladores han desafiado y fracasado en intentos anteriores. El reparto principal y secundario es bastante bueno. Glenn Ford, como un escalador experto de primer nivel, muestra, como siempre, una tranquila dignidad. Alida Valli esta guapísima y en su plenitud juvenil como Carla, una montañera decidida a cumplir el sueño de su padre, ella ha reunido un inusual grupo de escaladores para afrontar un casi imposible ascenso. Aceptable actuación de Lloyd Bridges como un joven ambicioso con un encanto despiadado y de pensamiento nazi. Los hermosos paisajes de los Alpes suizos compensan parcialmente algunos aburridos fallos y deficiencias del guión, especialmente la disparidad de personajes. La película está bastante bien; sin embargo, con varios lapsus cansinos, pero siendo suficientemente emocionante y conmovedora. Ésta pertenece al subgénero del ¨Montañismo¨ con películas importantes como "The Eiger Sanction" con Clint Eastwood, George Kennedy, Jack Cassidy, ¨K 2¨ de Franc Roddam con Michael Biehn, Matt Craven y recientemente "Himalaya" con Jason Clarke, Josh Brolin, Robin Wright, Jake Gyllenhaal, Sam Worthington y Kiera Knightley.

Detrás de la cámara Ted Tetzlaff, un director que se inició en el cine mudo y alcanzó un gran éxito como director de fotografía en los años 30 y 40. Ted Tetzlaff, quien dirigió profesionalmente ¨La Montaña Trágica¨, era más conocido como camarógrafo y pasó más de una década bajo contrato con Paramount, donde se convirtió en el director de fotografía favorito de Carole Lombard. Cuando Lombard fue prestada a Universal para la versión original de 1936 de My Man Godfrey, ella solicitó específicamente que también se prestara a Tetzlaff. Y dirigió algunas películas dignas, como: El tesoro del cañón perdido, El hijo de Simbad, Riffraff, World Premiere, La ventana, entre otras. Calificación: 6/10. Película de montaña aceptable y adecuada.