Haciéndome eco directamente de una gran cantidad de adjetivos de la crítica que en mi opinión la describen muy bien y siendo imposible elegir sólo uno porque la película son un cojunto de todos ellos y de un montón de sensaciones, diría que es: sorprendente y fascinante, hipnotizante, brutal, sórdida y oscura, incómoda, espeluznante y perturbadora, incendiaria, perversa...

Muchos detalles y matices... La evolución y transformación del personaje, su enfermedad... La gran crítica a la sociedad que juzga y se mofa del diferente, al sistema que lo aparta y abandona, a lo fácil (y peligroso) que es conseguir un arma, lo que llegas a empatizar con el protagonista... Qué gran actuación, menudo caramelo para un actor... Phoenix está descomunal, brillante, extraordinario, salvaje, espectacular... And the Oscar goes to...! (Eso espero o me voy a indignar mucho). He salido tocado del cine, te remueve, te incomoda, da mucho que pensar y mal rollo... Le doy un 9, pero voy a volver a verla, esta vez en V.O.S y es posible que la suba a 10... Hace mucho que no doy un 10 a ninguna y creo que esta se lo merece...

2 semanas después...

...Lo que suponía. Típica película doblemente disfrutable tras una segunda revisión... Te fijas más aún en la fotografía, la luz, los colores, la impresionante e inquietante banda sonora, el dificilísimo trabajo corporal de Phoenix: su cara, sus gestos, la mirada enferma y su enfermiza carcajada, su progresivo, comprensible y justificado deterioro, sus movimientos y bailes... El guiño del director a esa gran película que es también Taxi Driver y seguro que algo me dejo. Así que nada, me rindo al gustazo y al constante deleite de principio a fin en una película de 2 horas que se me ha pasado volando y ya puestos, contesto a mi propia pregunta... Sí, señoras y señores: ¡EXCELENTE, UN 10! ¡Gracias Mr. Todd, Gracias Mr. Phoenix!... Así, sí.