Sexify (Serie de TV)

Tropecé con esta serie por accidente. El nivel de la ficción que se hace en Polonia es realmente notable. Es curioso ver como los países del este han ido poniéndose al día estética y materialmente. Hasta hace poco eran todavía un poco ingenuos, se veía que intentaban ser modernos a toda costa, saltándose demasiadas cosas que echaban a perder a menudo el producto. Pero ya empiezan a enfocar adecuadamente las cosas porque se preocupan de lo que se tienen que preocupar.

Esta es una serie desenfrenada, de un feminismo recalcitrante y saludable, con actrices que tienen un nivel sorprendentemente alto. Sin duda, la serie quiere tener salida global (esas cosas que permite Netflix), lo que imagino habrá influido en el "look". Pero el desenfreno que gobierna esta historia, el homenaje a la mujer, a través del cuerpo y el sexo (espero haber leído adecuadamente el mensaje, a veces no se ver más allá de mi nariz y meto la pata hasta el fondo), me parecen acertados, necesarios, dignos de admiración. Y además, tiene la virtud de no pisotear a nadie en el camino. Hace bandera de la mujer sin plantear batallas sangrientas. La serie, sin duda, se dirige a público joven, a universitarios, a esas chicas y chicos que tienen la tarea de hacer que el futuro sea más igual y más respetuoso entre unos y otros. Pero mira por donde, yo me lo he pasado muy bien. Así que los cuarentones sin complejos y de alma joven, también se lo pueden pasar bomba.

A veces se hace un poco reiterativa, repite situaciones, anécdotas sin terminar de sacar todo el provecho de ellas. Los guiones, en ocasiones, discurren por requiebros poco comprensibles, pero milagrosamente consigue salir siempre airosa de los entuertos, arrancando una sonrisa de simpatía hacia estas tres chica en proceso de conocerse a sí mismas. Las cosas convergen al final hacia un empoderamiento que Natalia, Monika y Paulina tienen bien merecido. He visto la serie muy deprisa, snif, y ya echo de menos a estas chicas tan llenas de energía.

Lo más destacable de esta producción es su origen y la belleza de sus juveniles protagonistas. No es fácil ver cine polaco que no sean sesudas disgresiones sobre la vida y el mundo. Por el contrario es ésta una comedia ligera sobre tres estudiantes que pretenden crear una aplicación para optimizar el orgasmo femenino sin haber tenido ninguna de ellas un orgasmo en su vida. En ese sentido recuerda las comedias danesas protagonizadas por Ole Soltof y Annie Birgit Garde como Cama con Música o en Dinamarca se hace mejor que estuvieron tan de moda a principio de los `70. Para pasar un rato entretenido. Después de todo, no pretende otra cosa

Si buscas una serie que te produzca un placer exquisito probablemente sea esta misma, titulada “Sexify” porque pone todo su empeño y su esfuerzo en conseguir semejante y placentero objetivo.

—Si eres una mujer, la suerte está de tu lado ya que disfrutaras doblemente del atracón, pero si por el contrario eres un hombre, entonces aprenderás más de los que jamás hubieras soñado nunca en tu imaginario. Y en el supuesto de lo absurdo, de que no encuentres correlación con ninguno de los dos puestos anteriores, tanto en el hecho como en el dicho, nada podrá ayudarte salvo por el aprecio que le tengas a tu estimado y elevado ego—.

Si tu sexualidad está correctamente programada, entonces siéntete tranquila, porque disfrutaras de las pequeñas desventuras a las que se verán expuestas las protagonistas en su búsqueda de recabar datos. Si no lo está, entonces no te preocupes, porque has topado con la Serie perfecta, ya que a modo de manual, podrá ayudarte a descubrir que hay más allá del índice, que hace y sirve referencia, en el sexo.

Sexify es una Serie de TV tremendamente satisfactoria, sobre todo, en el apartado cómico, en el apartado ilustrativo, en el apartado divulgativo y por supuesto en el apartado reivindicativo. No solo es absolutamente genial y original, sino que también sabe añadir efectivas dosis feministas dotadas de un realismo muy sincero. Por suerte a demás sabe desinhibirse con una naturalidad pasmosa de lo estúpido que es no poder mostrar, por culpa del rubor, los cuerpos desnudos en la pequeña pantalla, cuando a sus creadoras les parezca oportuno, ya que eso se reconoce como una seña de identidad formidable. Una banda sonora incomparable por su ejecución es la guinda perfecta de esta autentica y perfecta Obra.

La historia recae en una estudiante sumamente inteligente con amplios conocimientos en desarrollar software y experta en programación que está decidida a ganar el concurso universitario del año, con su proyecto final de curso, creando una aplicación innovadora y placentera en formato de app. Un algoritmo que optimice el placer producido por el orgasmo femenino. En su intento de comenzar con el estudio, a través del trabajo de campo, todo se vuelve dificultoso a la primera de cambio, ya que sus conocimientos en materia de sexualidad se retrotraen a su conservada virginidad. Los principales problemas que le complican hacer esta tarea son la clara dificultad para socializar y su nulo interés en sexo. Es por esto que se ve obligada a echar mano de su mejor amiga, y de su vecina en la residencia universitaria, para implicar las de lleno en tan disparatado proyecto.

Así es como conocemos a las tres protagonistas de esta historia. Natalia, con un inteligente cerebrito, que intenta aprender todo lo que se pueda sobre el sexo sin tener la más mínima intención de practicarlo. Paulina, la amiga, profundamente conservadora y católica que solo conoce la posición del misionero, algo que practica en pecado con su prometido. Y Monika, la vecina, rica y guapa que persiste en practicar sexo siempre que puede para intentar olvidar al hombre que amaba.

Juntas, estas tres excelentes protagonistas hacen las delicias de esta Serie de TV, franca y honesta, y llena de golpes de buen humor. Donde estas jóvenes ‘victoriosas’ intentan librarse de tabúes y complejos, de inseguridades y perjuicios, a través de un camino salpicado de sátira y comedia, que no es otro, que el devenir de sus vidas en un mundo universitario que termine por lanzarlas al mundo real y ordinario.

Esta serie es descarada, divertida, irreverente, … eso es lo que quizás habría podido escribir hace, como poco, 10 años. Parece que en Polonia se hubieran metido en un agujero aislados del mundo hace 30 años, salieran hace 3 y se atrevieran a hacer ficción intentando subirse a la ola.

Es un tostón que me he tenido que forzar a ver desde la mitad del capítulo 2 para intentar dar un crítica completa. Pero que mientras la veía me limaba las uñas o peinaba al gato, por no perder tanto el tiempo.

No sé si es tierno o patético que piensen que esta serie puede impresionar o hacer gracia a estas alturas. Puede que en Polonia, pero el resto del mundo estamos en 2021. A mí de momento no han logrado sacarme ni media sonrisa. Hay gags de supuesto humor que son de películas de los 90 tipo “American Pie”. El porno que aparece es de los 70. Si hasta hay un roce de manos como un momento de la Inglaterra victoriana.

Los tres personajes principales quedan completamente definidos a los 2 minutos de aparecer en pantalla, y no lo digo como algo bueno. No resultan ni medianamente interesantes. Las protagonistas se comportan como crías de instituto en vez de como universitarias de último año.

Las interpretaciones son sosas, y la historia va de una chorrada a la siguiente. La ambientación, como toda la serie, parece de los 90 para atrás.

Como ya he leído en otra crítica, parece comedia de Pajares y Esteso. Como si mostrar tetas de veinteañeras fuera el sumo del descaro. En serio, a esta gente le hace falta pasar unos meses viendo lo que hemos estado viendo el resto los últimos 30 años, y ya si acaso, si es que no terminan totalmente escandalizados, atreverse a hacer un producto de consumo global. Mientras, mejor que se dediquen al público que conocen, el suyo. Es una de esas veces en las que se puede decir la manida frase: cuando ellos van, los demás ya hemos ido y vuelto veinte series y películas de allí.

Aquí las susodichas, de las que la precursora de todo es supuestamente inteligente y buena estudiante, se ponen a investigar sobre el orgasmo y ven porno o van una Sexshop, en lugar de leer sobre quienes les precedieron, que es lo que hay que hacer en toda investigación, como por ejemplo el homófobo Kinsey (del que hay una película), Masters y Johnson, (de los que hay una serie, que recomiendo antes que ésta, y también a todos los implicados en la serie), ambas mucho más transgresoras que ésta. O incluso al machista Granville (del que también hay una terrible película, oportunidad perdida de tratar el tema). Y por cierto, la tipa que inicia todo y va de sobrada no es capaz de decir la palabra sexo.

He visto la serie... Sexify (Netflix)...
https://www.filmaffinity.com/es/film991051.html

Un 5. Aunque se le podría dar un poco más, porque la he visto un poco por curiosidad. Y no es curiosidad por el sexo, sino que Netflix lleva proponiéndomela unos días a pesar de que no le hacía caso. Pero he visto que es una serie polaca, y eso me ha hecho probar. Y me ha ofrecido suficiente para ver más de un capítulo. Y una vez puesto, ya me he visto los ocho.

Mi curiosidad es por ver cosas de diferentes sitios, para ver cómo van las cosas por ahí. Y el caso es que esta serie, me ha ofrecido suficiente para confirmar mis prejuicios. ¿Cuáles?

Polonia está a caballo entre Alemania y Rusia, y es un país en el que la religión católica tiene un peso importante. Y en la serie he visto perfiles de gente con aspecto tanto germánico como ruso, con clichés en la trama que asocio al cine ruso y al alemán, y también con cierto toque casposo que me recuerda a la España de Esteso y Pajares, tanto por el enfoque de algunos gags, como por los prejuicios que han dejado asomar. Aunque, por suerte, los afrontan con un perfil ruso-germánico que me resulta igual de ñoño, pero más fino que el toque cutre "típical hispanis".

Vamos, que no la recomiendo, a no ser que te dé curisidad, pero yo me quedo satisfecho con lo que han ofrecido. Aunque influye su cierto, para mi, toque exótico. Una serie americana, española o sudamericana con similar calidad, me hubiese echado atrás desde el minuto cero.