Empecemos con lo obvio - el film tiene un interés variable. Aunque plantearse un largo gansteril como se hace aquí es de lo más interesante, el elemento politizado acaba inclinando la balanza un tanto quizá en demasía. Las sufragistas y anarquistas pesan finalmente en la trama más que las acciones de Tosar. Tal vez hubiera funcionado major como miniserie en Movistar o equivalente un material que tiende a lo expansivo dramáticamente y euqda un tanto enredado en un metraje de unas dos horas.

Y luego está la ambición, claro - de la Torre apunta alto. Encomiable, por cierto - se la juega e intenta la grandeza. En mi opinión, no la alcanza. Pero su intento de grandeza busca a largos como ROAD TO PERDITION (del que no soy fan en absoluto) o la fotografía de EL ASESINATO DE JESSE JAMES.

Eso sí - hay cosas de aplaudir -- Tosar como misterioso badass, la ambientación, la búsqueda del plano secuencia como alarde a cada momento en que es posible (lo cual acerca partes del largo a la presitidigitación de un Brian de Palma) y una set pieces con piños, tiros o coches que resultan de una vistosidad trabajada. También ayuda el uso de unos juiciosos VFX a la hora de situarnos en la Barna de los 20.

En fin - un largo que no es ni mucho menos redondo, pero que deja claro los nuevos aires del cine made in Spain.