Un inglés decide aprovechar el éxito de Saving Private Ryan de Spielberg y el reciente éxito de su Gladiator (romanos power ranger) para coger una de las "derrotas" del ejército estadounidense y hacer una película.
¿Qué podemos esperar?
Que a nivel técnico es increíble pero eso es todo, amigos.
En 1993, una operación "inocente y bondadosa" de llevar comida a los negritos se ve truncada por una reacción por parte de las milicas somalíes que ponen en evidencia al todopoderoso ejército de USA y sobre todo a sus oficiales superiores.
Encontramos una película coral donde no existe protagonista sino más bien quieren que nos identifiquemos con todos y cada uno de los soldados.
Del antagonismo ni hablar. No sólo el director no nos muestra ni un sólo plano del líder enemigo (Aidid) sino que la deshumanización de los somalíes es tan radical que es imposible siquiera tener un 0.00001% de empatía con el habitante de ese país que rechaza la intervención de "God Bless USA".
No contentos con ello tenemos el agravante de que no son "yahla yahla" bueno, sí lo son, pero es que además son negros como el carbón. Definitivamente de esta manera el director le hace un flaco favor a ese país que se jacta de no ser racista y que le da el óscar a "12 años de coñazitud".
No sólo es un país racista sino que con este filme se potencia el odio entre razas y además se juega sucio puesto que "el bando afro" no tiene nada que defender. Son animales. Dígalo señor Scott, monos salvajes...dígalo, hable claro. (luego dicen que los españoles somos muy racistas, que ignorancia)
Así que increiblemente no entiendo el propósito de esta cinta.
¿Mostrarnos que el gobierno racista yankee también fracasa en sus labores "humanitarias"?
¿Y de qué nos sirve? ¿si luego nos hacen odiar a los iranies con la inmunda y OSCARIZADAAAA "Argo"?
¿de qué nos sirve si se seguirán inventando guerras donde se conquistará un país tercermundista para sacarle todos los recursos posibles?
¿para qué cojones hace esta película señor Scott? Podía haber destinado el dinero de los contribuyentes a otras temáticas...
En lo actoral ni hablemos. Por un par de caras tristes y tembleques de algunos soldados no dejamos de ver "puros electrodomésticos parlantes" Mucho "Hooaaa", "Yes Sir" y "Roger" "y bla bla bla
ABURRE MUCHO ESO
No hay empatía con ninguno (siempre chuletas, lloricas o estúpidos) (Nota: el que va de payaso siempre muere en este tipo de películas, ¿lo han notado?
Y de los oficiales superiores ni hablemos: siempre el estereotipo de cara de mala leche, discurso dominante y chicle en la boca.
Para su juventud señor Ridley seguro queda bien esa imagen de los coroneles, generales, capitanes, sargentos....pero hoy en día sólo vemos al malo de Avatar que bastante pena daba al ir de "Rambo octogenario"
El despliegue técnico es impresionante. A veces no parece una película. El rodaje tuvo que ser hecho con mucha paciencia, y la postproducción más porque la película no mantiene un sólo plano más de 3 segundos en pantalla.
El montaje de sonido, eso si que ha tenido que ser un "trabajo de negros" pero muy bien ha quedado
Lástima que pasara en realidad aquél octubre del 93. Pero más lástima me da que haya otra vez sopa para cenar.
Gracias Ridley, go home

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