Es genial empezar una serie y tener la percepción de:
1. Ver algo diferente dentro de situaciones de escenas similares
2. Aprender algo (de una serie de este tipo de series)
3. Empatizar sí o sí con los personajes
4. Ver cotidianiedad natural
5. Contemplar cómo abordan la actualidad tal cual, lo más cercana posible a la realidad.

Cuando te encuentras con estos puntos, ya hay bastante ganado, al menos por mi parte lo agradezco. No es la típica serie que te quiere enganchar por morbo a lo de siempre, OJO, que lo hay, pero en un desarrollo bastante bien justificado con la trama y dentro de unos guiones evolucionados en equilibrio con lo que estamos viendo.
Son una maravilla los debates de cada episodio relacionados con el tema de filosofía que toca ese día en clase. Un algo que te hace despertar un poco la mente. Ese algo que incluso te puede echar un cable en situaciones del día a día. Es fantástico que te desmoronen ideas, que te haga plantearte aquello de lo que estabas tan seguro, que pienses que lo que está tan bien construido en tu moralidad, no está tan bien y viceversa.
En fin, tiene un notable bastante potente, a lo único que pondría pega es a que conforme vas avanzando en la segunda temporada se acaban algunas ideas y ya huele a giros sinsentido porque sí para darle viveza (que tampoco me parece mal, pero te puede sacar un poco de la serie) Explico un poco más este punto en Spoilers: