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España España · Poniente de Mallorca
Voto de psmelbr:
6
Animación. Comedia Basada en la colección de videojuegos "Angry Birds", la historia se desarrolla en una isla poblada por aves felices que no vuelan. En este paraíso, Red, un pájaro con muy mal genio, el veloz Chuck y el volátil Bomb nunca han terminado de encajar. Pero cuando llegan a la isla unos misteriosos cerdos verdes, serán estos tres marginados los que averigüen qué traman los extraños visitantes. (FILMAFFINITY)
9 de agosto de 2016
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película no tiene grandes momentos, ni escenas sorprendentes, es más, da la sensación de poco ingenio, e imaginación contiene la justita para calzarla con gags graciosillos y perseguir su cometido, el de entretener a la familia.

Así Pues, lo que es entretener, lo consigue, y al menos ha logrado que yo escuche y piense acerca de algunas frases que, según sea el carácter, sentido u orientación política, ya sea una visión progresista o conservadora, cada cual las interpretará según le convenga, y todo eso, como no, entre gags continuos para engullir una situación que ya nos parece cotidiana. Una invasión y sus consecuencias...

Vayamos al meollo de lo que se ofrece:

Una isla "llena" de pájaros, ojo, no muchos pájaros, sin su mayor y principal poder QUE ES VOLAR, donde su ídolo o antiguo líder es una vieja águila macho y zángano, perdedor con nula autoridad, y encima es amanerado, quizás un divorciado, a la vista está sin huevos en el nido, un aguilucho meón al que sólo le interesa su ego y sus trofeos. Es decir, le importa un pepino su gente y menos aún quienes le admiran. ¿Sinónimos?

Los pollos, perdón "quicir" los pájaros, representan una sociedad casi "perfecta" en exceso civilizada, muy ordenada, solidaria, hospitalaria, maleable, y como no, pacifista... ¿sinónimo de debilidad? Una sociedad democrática y avanzada de pajaritos atontados por un excesivo proteccionismo maternal, adiestrados en la pulcritud de reglas de conducta a la vez que generosa hacia la permisividad homosexual. Todo un limbo de colores, inocencia, pajaritos en la higuera, y futuras víctimas fáciles de manipular. Sin embargo, esta sociedad tiene recursos suficientes para castigar, segregar o privar la natural valentía o virilidad al más pintado que se precie en llevar la contraria a lo correctamente establecido, a pesar de que éste individuo, nuestro amigo Red, tenga toda la razón y merezca ser el pater de todos los huevos que los demás pronto perderán, sí, y además, sus paisanos los perderán, los huevos, sus propios huevos, por ser unos"Gilipuertas de mentes en exceso abiertas y confiados. Curiosa argumentación, ¿verdad? Red, nuestro pollo salvador, el pájaro apestado social de carácter fuerte que piensa diferente y poco dado a la amistad, acaba siendo el héroe cuando debería seguir sus principios y dejar que la sociedad que le está criminalizando agonize en sus miserias. Es Curioso, o algo parecido a que alguien en nuestra sociedad diga lo que piensa y se le califique con soltura y ahínco de nazi, racista, homófobo, machista, etc, etc...

¿Y Quién les va a robar los huevos?... Aquí entra la otra especie extranjera invasora, verde y porcina ( son mucho más numerosos que los pajarillos en exceso civilizados de atontamiento) esos marranos que, en plan "visita amistosa" siguen a un carismático líder que les dicta y ordena, organiza a su antojo, manipula, engaña, y el muy cerdo, perdón rufián, cual simpático orador campechano, disfrazado de feriante circense consigue camelarse a todo el poblado de los inútiles pajaretes (inútiles evidentemente en su discapacidad voladora y otras virtudes masculinas ya perdidas). El cerdo capo dictador y majestad, poco a poco, muy sibilinamente, gracias a la irrefrenable hospitalidad pajaril irá metiendo-colando a más y más de sus congéneres parásitos-ladrones para finalmente conseguir su meta, que no es otra que robar TODOS los huevos, en este caso, nada menos que para zamparse el futuro de toda la sociedad pajaril, atontada e hipnotizada en la mansedumbre, la GESTIÓN DE LA IRA, la confianza, el amor, la comprensión, la amistad, los puentes entre hermanos y porqué no, todo lo mío es tuyo y viceversa.

No quiero alargarme en "jipótesis" hijo-putescas, no, pero, por momentos, esa confianza pajarera de la película me recuerda mucho a esta sociedad occidental DECADENTE, mansa y blanda de atontados hipócritas que reclaman la diversidad (esos seres de luz que tanto adoran la mezcolanza de civilizaciones mientras ésta la mantenga y la sufran los demás con el dinero público), o esos confiados soñadores que cuelgan las pancartas de los "Welcome Refugies" (deberían posturear menos y adoptarlos en sus casas corriendo con todos los gastos), que por otra parte es muy humano, sí, claro que sí, pero mejor sería si esa masa humana indefinida de refugiados e inmigrantes que huyen de la guerra y la pobreza, esa humanidad de personas y de posibles asesinos radicalizados capaces de matar con un camión, mejor nos iría a todos si éstos pasaran por unos filtros de seguridad, el destierro de malhechores reincidentes, la aniquilación de mafias y captores de terroristas, filtros para erradicación de usurpadores de recursos y servicios, manteros y gente ilegal que no cotiza ni aporta nada al sistema cuales parásitos sociales perpetuos, etc....

Esos filtros NECESARIOS que la película obviamente sólo nos presenta en los reparos y desconfianzas de tres marginales pájaros raros, muy raros, pero bien espabilados, seguros y firmes en la defensa de sus destinos, o sus propias moradas. Qué menos!..A nuestro pájaro cabreado Red, ¡le costó cinco años levantar su morada! para que un cerdo "molón" se la tumbe muy graciosamente.... MENSAJITOS, GAGS Y más MENSAJITOS, llenan una trama sencilla que invita a la reflexión de lo que acontece para finalmente dejar a un lado las tonterías y nombrar las cosas por su nombre en la cruda realidad. Los cerditos verdes son guasones embaucadores vende-motos muy fiesteros ladrones, y los pájaros, lo son todo menos lúcidos y pícaros en el sentido "cabroncete" de la palabra pájaro, inútiles y ciegos, hasta la aberración, de sus propios destinos.

Buena película, "divertida" y picarona, un poco puñetera para los adultos, deja mensajitos para quien los quiera ver o imaginárselos. El final de la película es lo esperable, una sociedad pajaril que por fin despierta, lucha y rescata, sacando huevos, nunca mejor dicho, recupera sus propios huevos y el futuro.
psmelbr
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