La original es una de mis películas favoritas, así que voy a ser un poco metódico con esta secuela.
Esta segunda parte es una basura como una catedral de grande, y además una falta de respeto a los fans de la mítica primera parte.
El director cocina un trabajo tan malo que es difícil hacerlo peor, el argumento es una basura sin pies ni cabeza, cronológicamente no respeta a la original, y la Tity Twister que sale es de cartón piedra.
Cutre hasta decir basta, lo que salvaría de la quema total y absoluta son algunos detalles de los protagonistas principales, sobre todo de Jesús, y algún diálogo que otro entre los personajes.
Una deprimente e infumable película que jamás debió existir.
Mala.