Esta película es un clásico del cine infantil que en algún momento todos hemos visto. Una película que cuenta con una canción realmente famosa que todos hemos tarareado o cantado alguna vez.
He visto esta película siendo un niño infinidad de veces, y recuerdo divertirme con las aventuras de este coche mítico de carreras, el cual es abandonado pero al que le dan una segunda oportunidad convirtiéndolo en un coche totalmente mágico.
Después de muchos años he decidido volver a verla y recordar antiguos años. He descubierto que mi recuerdo no era tan real como yo esperaba; ya que uno descubre que el paso de los años no le ha hecho justicia a esta historia de aventuras mágica.
Distingo claramente dos partes en este film dirigido por Ken Hughes. Por un lado una primera parte que funciona muy bien gracias a una historia que convence y distrae. Ese comienzo contando los años dorados de ese coche de carreras, el cual queda en el olvido al sufrir un accidente; hace que uno se enganche. Uno disfruta con esa segunda oportunidad que tiene gracias a dos niños que sueñan con un mundo imaginario conduciendo ese coche; y a ese inventor loco que lo recupera convirtiéndolo en una joya sobre cuatro ruedas.
Esta parte es buena y uno se divierte. Pero a mitad de película todo cambia ya que la historia se transforma en un cuento demasiado infantil para que se le tome en serio. La trama se desvía de su eje central, y toma un rumbo hacia un mundo de fantasía donde villanos "muy muy muy malos" quieren quedarse con ese coche mágico. Unos "malos malísimos" que viven en un país peligroso y extraños llamado Bulgaria. ¿Extraño y peligroso Bulgaria? Y lleno de unos personajes muy mal desarrollados ya que su lado oscuro resulta demasiado infantil; y no es para nada creíble.
Este film intenta simular al tremendo éxito de "Mary Poppins" utilizando a la misma estrella Dick Van Dyke, y con una actriz con un gran parecido a Julie Andrews. Además de utilizar a dos niños a los que tienen que cuidar que viajan a un mundo imaginario. Sin lugar a dudas los parecidos son más que evidentes.
Esta película se trata de un musical que cuenta con una canción muy buena que lleva su título, y que es muy reconocible. Decir que el resto de las canciones no merecen mucho la pena, y es ahí el motivo de que no se recuerden ni se conozcan.
En fin, "Chitty Chitty Bang Bang" es un clásico del cine infantil que trae muchos recuerdos, pero que el paso de los años le ha hecho perder calidad. Cuenta con una primera parte muy entretenida y efectiva; pero en cuanto empieza el mundo de la imaginación, todo toma una dirección que no convence.