Nos encontramos ante una película que en mi opinión no pasa de ser el típico film de sesión de tarde durante un día lluvioso, para ver en casa con manta y chocolate.
Es cierto que la película tiene momentos interesantes, que las interpretaciones son pasables, que la historia engancha, que el guión es atrayente; pero no deja de ser una película que se mantiene en la línea de "no está mal". En pocos momentos uno como espectador es capaz de notar alguna escena que saque de ese letargo a la historia.
No obstante la película resulta interesante y entretiene; aunque uno tiene la sensación mientras la ve que va a ser una de esas historiass que con el paso de los años caerá en el olvido.
Kevin Smith se une nuevamente a su gran amigo Ben Affleck para ser el patrón de esta película donde se le unen otros grandes actores como Liv Tyler, Will Smith, Matt Damon o Jason Biggs. Todos ellos realizan unos personajes (algunos son simples cameos) que están bien dibujados. Únicamente el personaje de la hija es el que odio. Lo siento, pero no puedo soportar a estos niños americanos repelentes, que lo saben todo y que contestan constantemente a sus padres y les dirigen la vida.
En fin, una película que entretiene y con la que pasas un rato agradable; que cuentas con escenas y momentos brillantes, pero que no consigue ahondar en uno durante el tiempo que la está viendo salvo en escasas ocasiones.