Perplejo, así es como me encontré al salir del cine, durante los siguientes 15 minutos después de la película apenas podía articular palabra, estaba en una nube de asombro.

Christopher Nolan no ha sido capaz de cerrar el círculo de la mejor manera, convirtiéndola en una de las mejores trilogías de la historia del cine. Son dos horas y media de tensión, acción, emoción y mucha angustia.

El reparto una vez más está de 10, incluso la propia Anne Hathaway que tenía mucho miedo de que estropeara la actuación del conjunto. Impagables las lágrimas de Michael Caine. Ver a un mito del cine transmitiendo tanta emoción en una película es algo que no se puede pagar.

Y cuando parecía que Christopher Nolan no podía sacarse nada nuevo de la chistera que nos sorprendiera después de mostrarnos al mejor joker, hace entrar en escena al malo más malo de la historia del cine, Bane, igual de inteligente y frío que joker pero 10 veces más fuerte y violento, haciendo que disfrutes más con sus escenas que con las de Batman.

Las dos nuevas incorporaciones al reparto están tremendas, haciendo un especial inciso en Joseph Gordon Levitt, que me parece un actorazo del quince.
Si se le puede poner algún pero a esta película es el guión, que no es de los mejores que he visto y algunas escenas en las que te cuestionas la falta de realidad. Pero estos aspectos no son suficientes para quitarle el 10 a esta obra maestra.

Muy recomendable ver la película en IMAX es simplemente espectacular.