Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Pedroanclamar:
4
Intriga. Drama. Thriller Adaptación de un cuento de Julio Cortázar que narra la historia de Thomas (David Hemmings), un fotógrafo de moda que, tras realizar unas tomas en un parque londinense, descubre al revelarlas una forma irreconocible que resulta ser algo tan turbador como inesperado. (FILMAFFINITY)
12 de febrero de 2020
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es cierto que la película nos muestra esa estética británica de los sesenta, la llamada Swinging London. La pregunta que cabe luego de esto es ¿y qué? Lo interesante, lo llamativo sería problematizarla de algún modo, arriesgarse a proponer tensiones, conflictos más explícitos. El filme toma un cuento de Cortázar y lo ambienta en esa Inglaterra de la década de los sesenta, ¿con qué fin? Sí propone el conflicto, pero muy silenciosamente: el protagonista se nos presenta, quizás, como el tipo medio de esa generación, tipo medio con algo de dinero que, como toda persona con esas condiciones económicas, tiene formas distendidas y creativas de pasar su tiempo: como no es un asalariado no le da su excedente de trabajo a nadie, trabaja para sí mismo. Por otro lado, se presentan los mimos, que hacen aparición solamente al comienzo y al final de la película, pidiendo dinero. La metáfora es sencilla y se reduce a un par de escenas, lo que le quita fuerza al film: los excluidos que no tienen voz fingen o creen que tienen espacios y tiempos de distensión y esparcimiento. El protagonista no los fotografía, siendo estos mimos los más escandalosos y bulliciosos.

Más allá de esa pequeña lectura marxista no aprecio ni veo más que el deseo prurito de exponer el contexto cultural británico: escenas larguísimas mostrando las vestimentas de moda de mujeres siendo fotografiadas por el protagonista, las juntas y saraos de jóvenes o la misma aparición de The yardbirds. La película se expone como propaganda cultural británica más que como buen ejercicio cinematográfico consistente.

Las escenas en el parque son notables, el hecho mismo que Antonioni haya hecho pintar mucha de la naturaleza que allí se presenta demuestra un estímulo en la dirección, al menos, un empecinamiento por hacer bien las cosas, como mínimo. Las actuaciones son básicas, pues sus personajes son planos, no requerían de una actuación sobresaliente. El protagonista y sus expresiones no abandona nunca la neutralidad de expresión.
Esta película está muy lejos del buen cine de Antonioni, como por ejemplo, de La aventura.
Pedroanclamar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow