ººº Se apagan las luces de la sala. Los nervios a flor de piel. 11 años esperando este momento sin saberlo en aquel lejano 2008. Cuanto hemos cambiado. Sí, esto es 'Endgame' y la peli va a empezar con la certeza de que cuando termine nada será igual. El viaje comienza sin tregua hasta el final. Y sí, la sensación de que nada volverá a ser lo mismo ººº

La sensación tras unos títulos de crédito que carecen de la característica escena postcrédito a la que Marvel nos había acostumbrado desde siempre es de que con 'Endgame' finaliza una época. Posiblemente la más brillante de todas en cuanto a cine de superhéroes se refiere, con la película de superhéroes más atípica y emocionante de todas las que hayan surgido. 'Endgame' se aleja por completo de los estándares de este tipo de producciones y más en concreto de lo que ofrecieron las anteriores entregas de 'Avengers', donde lo primordial era mostrar destrucción a la mayor escala posible y ver como funcionaba la evolución que habían sufrido los personajes pero en sus películas individuales. En ocasiones el equilibrio entre testosterona y relaciones interpersonales funcionaba armónicamente ('Avengers 1' o 'Civil War') y en ocasiones la primera adelantaba por la izquierda a la segunda con riesgo de multa por falta de chicha en lo que se contaba y como se contaba ('La era de Ultron').

Sin embargo, en 'Endgame' Marvel da un golpe de personalidad sobre la mesa (algo que precisamente muchos habían criticado anteriormente que hacía falta) y plantea una obra tan completamente distinta a las demás que en principio llega a desconcertar, con un grado de profundidad en las relaciones entre personajes como antes no había sido visto, y una serie de escenas íntimas absolutamente impropias en un megablockbuster de 400 millones de dólares. Los Russo plantean 'Endgame' como la contrapartida absoluta y radical de lo que supuso 'Infinity War', reduciendo el nervio y la adrenalina a momentos muy puntuales que es cuando verdaderamente son necesarios, y dejan a sus personajes respirar libremente en un último aliento que arrancará más de una lágrima en determinados momentos. Pero cuando deben apretar el gatillo lo hacen, y a buen seguro que nadie quedará indiferente con el tramo final del film, a pesar de que en determinados momentos lo atropellado de la acción emborrona parte del resultado final de la misma. Eso sí, si en este 2019 y en la década siguiente encuentran un momento más espectacular y rebosante de épica como el que acontece en cierto momento del film que me aspen.

Las apariciones sorpresa son completamente impredecibles y en lugar de ser simplemente carne de fandom como en la nueva trilogía de 'Star Wars', obedeciendo aquí a un plan muchísimo más elaborado, en el que cada una de ellas juega un papel primordial, no solo para terminar de complementar a cada personaje, sino para que la despedida sea aún más emotiva. Y se nota de primera mano como todos y cada uno de los miembros del reparto ha tenido que disfrutar al máximo cada uno de sus segundos en pantalla. Muy bien por el tremendo protagonismo de Ant-Man como pago por no haber formado parte de las anteriores entregas de 'Avengers' en la entrega en la que vemos a un Paul Rudd más desatado que nunca, o la tangible gama de nuevos matices que Robert Downey Jr, Chris Evans o Jeremy Renner son capaces de aportarle a unos personajes que llevan ya interpretando durante una década. Y es que para el recuerdo queda el prodigioso plano final, máxima expresión del grado de emoción que han pretendido alcanzar los Russo. Posiblemente nunca un héroe fue despedido de manera tan honrada y honorable en una pantalla de cine, haciendo justicia con su propia historia.

'Vengadores: Endgame' trasciende el simple hecho de ser una buena peli de superhéroes; con ella Marvel ha conseguido hacer buen cine. Ese cuyo eco resuena tras encenderse las luces de la sala. Ese que sienta cátedra de como se deben hacer bien las cosas en el presente y en el futuro. Ese, que como bien adelantaron en la campaña promocional, marcará a toda una generación. El mayor reto de Marvel a partir de ahora será encontrar un material que logre acercarse mínimamente a la abrumadora grandeza de todo lo que han sido capaces de construir, pero eso ya es otra historia.

·LO MEJOR: Su increíble capacidad para emocionar.

·LO PEOR: En ciertos momentos acusa cierta falta de nervio y garra narrativa.