"La serie Divergente (Insurgente)" es una película que perfectamente podríamos comparar con el clásico episodio de relleno que habita en toda serie que se precie con la única finalidad de completar la temporada de marras, ese episodio que hasta los fans más acérrimos se saltan a propósito.
En esta secuela de la saga literaria creada por Veronica Roth el avispado de Neil Burger, sabiendo el nido de avispas que tenia entre manos, se levanta de la silla del director y le deja la patata caliente a Robert Schwentke, quien no hace mucho toco la gloria con "RED" (2010) pero que desde entonces no ha vuelto a ser el mismo. Y aquí se termina mi objetividad, a partir de esta linea sacare la navaja y empezare a asestar navajazos a diestro y siniestro porque, en el fondo, es lo único que merece este producto. "La serie Divergente (Insurgente)" es un absoluto tostón, de principio a fin. El film prosigue, más o menos, en el mismo punto donde termino la anterior entrega, nuestros sufridos protagonistas son ahora fugitivos perseguidos por la malvada de Kate Winslet, y van de aquí para allá refugiándose en el primer sitio que pillan. En base a esa sencilla premisa se arma una trama que vive de pequeñas escaramuzas que no darían, por separado, ni para cortometrajes, pero con las que el pobre de Robert Schwentke tiene que componer una película de casi dos horas. "La serie Divergente (Insurgente)" es una cinta insulsa, casi como sin alma, llevada a cabo por el simple hecho de que había que hacerlo, y ya esta. Todo lo que acontece en el film desprende el inconfundible aroma de lo impostado y falso.
Y sabéis que es lo más doloroso, descubrir horrorizado que lo más llamativo y estimulante de "La serie Divergente (Insurgente)" llega justamente cuando se va a acabar la película, cual cliffhanger traicionero. Lo que apoya más si cabe la teoría que defendía en el primer párrafo.
En resumidas cuentas, "La serie Divergente (Insurgente)" es un producto innecesario, hecho unicamente para saciar las ansias del fandom de turno que se ha malacostumbrado a recibir una película al año, obligando a estirar el hilo argumental a limites en los que vive de la nada más absoluta. ¿Se sentirá el fandom de "Divergente" saciado con esta secuela?... Si su respuesta es que si, creo que algo hemos hecho mal.