Esta película combina los mejores y los peores elementos de la saga Star Wars al mismo tiempo, siendo su balance final positivo. El principal aspecto negativo es que los personajes principales no quedan bien desarrollados porque la historia se limita a describir cómo son mediante el diálogo, en lugar de demostrar la personalidad de cada uno mediante situaciones y acciones de los mismos. Como principal aspecto positivo, la película mejora según avanzan los minutos dejando lo mejor que puede ofrecer para el final, el tercer acto es un gran clímax en forma batalla sin cuartel con impresionantes efectos especiales. Esta saga ha triunfado por sus personajes y por su historia, no por centrar el foco de atención en los efectos especiales para exteriores, escenas de acción o personajes. Rogue One olvida esta premisa por momentos pero es capaz de recordarlo cuando es necesario, algo que sin duda invita a la esperanza.