Visto lo visto en cine de catástrofes, esta película merece un visto bueno por varios motivos. La historia es original, parte de una idea creíble, el problema es su desarrollo. Los hechos se desarrollan exageradamente sobre un base científica conocida como es el cambio climático. Todo empieza bien, parece que promete, pero a mitad de la cinta empiezan a verse escenas de vergüenza ajena como la de la chimenea de la biblioteca, o el final, pero bueno... La película se deja ver bastante bien, es distraída y aporta frescura a este género. Es de agradecer que el uso de los efectos especiales sea coherente, esto anima mucho el visionado. Por lo demás, algo de acción, un poco de drama de sobremesa, y la lección moralista política. Sin embargo, creo que es interesante, por lo menos, es, un acercamiento más serio que otras cintas y a Dennis Quaid siempre se le han dado bien estos papeles de consejero.