Haz click aquí para copiar la URL
España España · Granada
Voto de Jedirojo:
4
Cine negro. Intriga En el siglo XVI, los Caballeros de la Orden de Malta regalaron a Carlos I de España y V de Alemania la estatuilla de un halcón de oro macizo con incrustaciones de piedras preciosas. Era una muestra de gratitud por ciertas prerrogativas que el monarca les había concedido. Sin embargo, la joya no llegó nunca a manos del Emperador, ya que la galera que la trasportaba fue asaltada por unos piratas. Cuatrocientos años después, el detective ... [+]
31 de agosto de 2015
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me las prometía muy felices cuando leí la reseña del dvd y más aún tras ver las puntuaciones que se le dan a la película en esta web... pero no ha estado a la altura. Creo que hay demasiada gente que vota las películas sugestionada por lo que otros dicen, casi como si temieran perder reconocimiento público por decir algo diferente a lo políticamente correcto. Me encantó Bogart en Casablanca, sin embargo en esta ocasión no me ha convencido. Pone una voz exageradamente nasal (en versión original), que hasta la fecha me había pasado casi desapercibida en otras películas, supongo que para representar mejor al mindundi americano de bajos fondos que interpreta, pero tanto que ralla el ridículo. Me cuesta tomarme su personaje en serio. La historia tampoco ha sido lo esperado: el emperador Carlos I de España cede la isla de Malta a la orden del temple a condición de que reconozcan su autoridad sobre la misma y le paguen todos los años un halcón para practicar la cetrería. Un gesto simbólico que en su primer año es sobresatisfecho, pues la orden decide encargar una hermosa figura de halcón hecha de oro como agradecimiento. No obstante, el barco que lo lleva no llega a España. Cinco siglos más tarde una joven (Mary Astor) se presenta en la oficina del detective privado Sam Spade (Bogart) en San Francisco. Busca ayuda para localizar a su hermana, que ha huido con un peligroso sinvergüenza. El socio de Spade (Jerome Cowan) se apresura a hacerse con el caso, perdido en las largas pestañas de su cliente (hasta aquí se reconoce que uno de los capítulos de la serie Castle es un homenaje a esta película). Esa misma noche es asesinado mientras localizaba al endiablado vividor y la incompetente policía decide que Spade es sospechoso de matar a su amigo. Y así nuestro Bogart inicia una aventura en la que nadie es lo que parece o dice ser, en la que se urde una trama enrevesada tejida por despiadados individuos de singular carácter; un gordo millonario sospechosamente parecido a Kingpin, un traicionero árabe de gustos y maneras poco masculinos y un joven psicótico de gatillo fácil y mente lenta... todos son Raiders of the Lost Arc, bueno o del pajarraco de oro que para el caso es lo mismo. Empero, quien pudiera pensar en algo parecido a Indiana Jones que se olvide. A quien le sugiera un clásico del cine negro que se lo piense dos veces. La trama es simple, lineal y tiene poca profundidad. Casi tan infantil como el final de la novela "el ocho", con cuatro gatos yendo de una lado a otro de la ciudad como quien juega al ratón y al gato. La bella dama Mary Astor no es ni bella, ni atractiva, ni nada... muy mala elección, esa actriz no haría perder la cabeza a ningún detective, menos aún a dos. Su interpretación me parece sobreactuada, igual que la del resto del reparto, hasta el punto de que los personajes parecen parodias de tebeo. Si el director no buscaba precisamente eso creo que se ha columpiado, porque le ha quitado credibilidad al guión. La historia va avanzando a trompicones, sin fluidez, ora va despacio hasta aburrir, ora va a punta de pistola, pero sin balas... vamos, que no sé por qué seguían levantando las manos los personajes cuando les amenazaban, si total ya debían de saber que no había peligro alguno. Pero lo más perturbador, lo más psicodélico, lo más emparanoiante del asunto ha sido que el fantasma de Graham Bell se manifestara durante todo el metraje para perseguirnos en nuestros sueños más estrafalarios sin necesidad de ouija alguna. Sí señor, con un par... Me explico, ¿alguna vez habéis tratado de recordar cómo era la vida antes de tener iphones? ¡Qué cosas¡ Antes no había manera de que te avisaran de nada hasta que llegaras al trabajo, colegio o casa porque no había móviles. ¡Qué gran invento el móvil¡ ¿verdad? ¡Pues nos equivocamos! El móvil es un invento del capitalismo, nos han vendido algo que no necesitábamos, eso lo demuestra Huston en su cinta. Cada vez que Spade llega al despacho... suena el teléfono, cada vez que llega a casa... suena el teléfono, cada vez que enseña la jeta por la recepción del hotel... suena el silbato del tren, no que es broma, suena el teléfono. Qué don de la oportunidad, qué saber estar en el momento adecuado, qué bien que sabe hacerse esperar, qué pedazo de cagada... Bueno, lo mejor de la película es que echas un rato y que hay películas aún peores por ahí fuera, en la oscuridad de un mundo malvado y cruel, mucho peores desde luego. ¿Un 8,3 de media? ¡Ja! Bienvenidos a la mediocridad... ¡uy! esperad un momento ahora vuelvo, es que... suena el teléfono.
Jedirojo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow