Antes de nada, quiero remarcar que esta es mi puntuación a los 5 volúmenes (cuatro temporadas) que de momento se han ofrecido, no tan sólo la primera temporada. Paso a hablar individualmente de cada una de ellas.

El primer volumen “Genesis” empezó muy bien, excelentemente diría yo, con una renovación de estilo y contenido en la TV como no se veía desde hace mucho tiempo. Era una suerte de “X Men”, pero dotada de una profundidad dramática y un virtuosismo en la deconstrucción narrativa realmente encomiable. La manera en que se van hilvanando y cruzando los diferentes personajes a lo largo de la historia en el arco temporal que se dibuja desde el principio, a modo de cómic con tono de realismo mágico, hasta el enfrentamiento final es excepcional; un 9 en toda regla para una serie que revolucionó a las audiencias y creó una legión de seguidores de sus carismáticos personajes. El entrañable Hiro y su inseparable Ando, los inefables hermanos Petrelli, la indestructible cheerleader Claire Bennet, la bipolar y buenorra Niki Sanders, el atormentado telépata Parkman, el doctor Mohinder, el implacable Noah Bennet, y como no, el gran villano Sylar. Una cantina espectacular interpretando un guión memorable: “Salva a la animadora, salva al mundo”.

Después pasamos a una segunda “Generations”, mucho más floja, y muy corta por la huelga de guionistas, que presentaba ciertos defectos que la rebajaron considerablemente: los transcursos de Hiro en Japón no son tan emocionantes como debieran, el villano a batir era anticarismático, Sylar sin poderes, etc. Aún pese a esto, resultaba entretenida y digna, un 5.

La tercera temporada se dividió en dos bloques. El tercer volumen “Villains” presentaba una piara de poderosos malvadotes escapados de su confinamiento a los que había que atrapar o eliminar, amén de chaqueterismos en ciertos personajes principales que se transmutaban al lado contrario del que solían estar. La originalidad ya se acabó irremisiblemente, pero resultaba muchísimo más divertida que la segunda, un 6. El cuarto volumen “Fugitives”, es una mezcla de “Heroes” con “24”, un ritmo vertiginoso y apasionante que subió enteros arriesgando la apuesta, con nuestros héroes perseguidos por organismos gubernamentales en una trepidante persecución continua; aún lejos de la brillantez de los inicios, pero se seguía con gusto, un merecido 7.

Llegamos a la cuarta temporada y quinto volumen, la patética “Redemption”. Un completo desaguisado, aburrido, tedioso, hasta el hartazgo, donde la sensación de aventura, misterio y emoción se calcinan en un guión mediocre, estirado, personajes y situaciones de risa (la sorda del violonchelo, el rollo de los tatuajes y las brújulas, Robert Knepper volviendo a interpretar al T-Bag de “Prison Break” pero con dos manos y sin intentar violar a nadie…), desarrollos previsibles y/o ridículos, un final bochornoso y lo que hacen con Sylar no tiene nombre; un 3 y por piedad.

(Acaba en spoiler sin destripar nada)