Común comedia veraniega cuya mayor pretensión es conseguir alguna carcajada aislada, tirando para ello de un gran repertorio de tópicos, entre los que destacan los chistes de pollas y demás gracietas sexuales, como si el guion lo hubiese escrito un chaval de 13 años.

La historia se desarrolla a trompicones puesto que, básicamente, es una sucesión de escenas tontas porque sí. Una familia que se va de vacaciones y se para en todos cuantos sitios encuentra en el camino, y en todos ellos le ocurre alguna chorrada, además de encontrarse mágicamente siempre con los mismos personajes recurrentes porque eso, de alguna forma, le debe resultar gracioso a alguien.

Ed Helms es el típico padre de familia estúpido y sufridor que se pasa poniendo sonrisa bobalicona de principio a fin. Personaje visto mil veces en el cine. El resto, familia y amigos, son personajes estrafalarios, bobos y planos.

Se hace larga y aburre mucho. Lo mejor son las fotografías de los créditos iniciales y finales y algún destello de humor negro.