Bella historia de amor entre una cautiva blanca y su captor un sioux, ambientada en Kansas en 1868, cuenta los avatares que acontecieron a Ann Brewster Morgan, basada en hechos verídicos. La historia de amor es una auténtica pasada, el amante prohibido, el rapto, etc, igual la película peca de un poco de idealización, se de sobra que los hechos que sucedieron no son exactos a lo que se expone en la película, sino más duros, pero es hermoso soñar un poco. Película que muestra muy bien el entorno político y social de la época y la tensión de las diferencias raciales, está logradísima, Janine Turner está mejor que nunca (aunque el farandol colorado en pleno Kansas del siglo XIX como que no se lo cree ni el maqillador) y tiene mucha química con Michael Greyeyes. A ésto súmale una banda sonora ideal, y la emoción que trasmite, de las mejores para la tele. Imprescindibles para los incurables románticos de amores imposibles.