Anteriormente a este film, solo había visto al actor belga en un bodrio llamado RENDIRSE NUNCA, RETROCEDER JAMAS, donde brillaba por su excelente condiciones físicas, aún al día de hoy... no he visto a nadie con su flexibilidad.

Esta peli me trae muchos recuerdos de juventud, ya que la vi con 16 años y en esa época un chaval tiene muchos pájaros en la cabeza. Me imaginaba, y solo eso, imaginación, ocupando el lugar de Fran Dux, no en plan chulito de barrio, repartiendo a diestro y siniestro, sino como un tipo de héroe... ayudar a los débiles. Hoy día esas ideas me causan risa, ja ja ja.

Algo que con el tiempo ha debilitado la carrera de Van Damme ha sido la mala elección de los guiones y de las historias a contar. En este caso en particular, juega sobre seguro, cuenta la historia de un americano campeón de artes marciales en territorio prohibido, donde todo el que no fuera oriental y practicase artes marciales... era sacrilegio. La historia promete ser muy interesante, aunque los fallos en el guión sean muy evidentes. ( ver spoiler 1 )

Y el desarrollo de los personajes es realmente desastrozo. ( ver spoiler 2 )

En cuanto a la puesta en escena es de lo mejor, la gran variedad de estilos, de luchadores con sus propias artes... lo hacen muy atractivo. El lugar donde se celebran los combates, la forma de indicar quienes serán los próximos en luchar, todo un acierto. Las coreografías de las peleas... dejan mucho que desear, pero no llegan a hacer el ridículo.


LO MEJOR: El flash-back de como se hizo luchador.
LO PEOR: La poca consistencia del guión.

Lo dicho, una peli que a pesar de los años transcurridos, aún me sigue enganchando al sillón.