Soy un fiel seguidor de los trabajos de Mario Casas, creo que a día de hoy, no exista película suya que no haya visto. No matarás te ofrece todo lo contrario a lo que te presenta la introducción a la historia, un chico tranquilo, noble, tímido, buena persona que cuida a su padre enfermo hasta que fallece y debido a todo ese trabajo realizado, su hermana lo quiere premiar con un viaje alrededor del mundo. Hasta ahí todo bien, todo correcto...y yo que me alegro.

Pero, pero, pero, comete el error precisamente de dejarse llevar por esa forma de ser y pagar una hamburguesa a una desconocida, la cual para agradecerle la acción, lo invita a que la acompañe a casa, dando rienda suelta a una noche llena de locura, sexo, violencia, muerte, peligros, donde su vida comienza a tener muchas posibilidades de escapársele de las manos y no volver a recuperarla.

A mi que a lo largo de su carrera para aparentar un chico noble o simplón, le pongan el peinado de un gilipollas y gafas, macho, ya raya la vergüenza ajena, por Dios, que para dar esa imagen no hace falta vestirlo como el tonto del pueblo. Cuando arranca la historia de verdad, se convierte en una auténtica locura, donde la adrenalina del personaje y de los espectadores se dispara enormemente.

El guión hace aguas por muchos lados, pero bueno, entiendo que era la forma correcta de sacar esto adelante de alguna manera. No se pierdan los consejos de la hermana al final y las decisiones que toma el nota, como para mear y no echar gota.