La presente fue uno de los éxitos comerciales del 2000, año en el que "Scary Movie" se coló en el 9º puesto de las más taquilleras en los Estados Unidos con más de 157 millones de dólares y en el 11º a nivel mundial sobrepasando los 278 millones. Obviamente esto no la convierte en un buen trabajo cosa en la que me temo que se queda a medias. De lo que se trata aquí es de una idea brillante, la de parodiar el cine de terror en general y en particular, "Scream" (1996) para dar lugar a una comedia juvenil, absurda y gamberra más cercana a "American Pie" (1999) y continuaciones posteriores que a las famosas "Agárralo como puedas" (1988, 1991 y 1994). Eso sí, imprescindible conocer la Scream original, recomendable el resto de la saga y para nota, los clásicos del cine de terror adolescente.

Estamos aquí como en "Torrente" (1998, 2001, 2005 y 2011) aunque no tan descarado. Por un lado, un derroche de humor irreverente por momentos muy gracioso pero con alguna parida de más. Ya digo que la idea en sí es muy buena pero Keenen Ivory Wayans sólo la explota en contados momentos, como el inicial, en el que el chiste viene precisamente de la propia situación terrorífica. El resto lo solventa con dosis de mal gusto, hay escenas, la paliza a la protagonista, o comentarios, "nunca me tiraré a una menor", tremendos, drogas y constantes alusiones o secuencias sexuales en las que claramente se abusa. De hecho el personaje de Shorty (Marlon Wayans), que es como Randy (Jamie Kennedy), además de sobrar, no se parecen en nada. Al menos "Scary Movie" entretiene y ellas son monas.