Haz click aquí para copiar la URL
España España · Granada
Voto de Nadja:
6
Drama. Comedia Balram Halwai (Gourav) narra su ascenso épico y cargado de humor oscuro de aldeano pobre a empresario exitoso en la India moderna. Astuto y ambicioso, Balram se abre camino para convertirse en chófer de Ashok (Rao) y Pinky (Chopra Jonas), que acaban de regresar de Estados Unidos. La sociedad ha entrenado a Balram para ser una sola cosa, un sirviente, por lo que se vuelve indispensable para sus ricos amos. Pero una noche todo cambia.
9 de febrero de 2021
17 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Netflix no suele añadir muchas películas interesantes a su catalogo, pero el caso de la cinta de Ramin Bahrani es una de las excepciones que tanto placer provoca encontrar sin previo aviso.


Cuando hablamos del cine de la India estamos acostumbrados a rememorar escenas de gran colorido, vestuarios majestuosos y apasionadas historias de amor de amantes que danzan al más puro estilo Bolywood con coreografías llenas de ritmo, que desprenden optimismo y felicidad.


‘’Tigre blanco’’ nos sumerge en la verdadera India, no esa que solemos recordar al evocar un país exótico con una gastronomía exquisita, sino la verdadera India llena de pobreza, desigualdad de clases, esclavitud e ignorancia. La historia de Balram es la historia de un muchacho que nace en una familia pobre dentro de un contexto social y cultural que le impide avanzar y prosperar en la vida. Y es que Balram dispone de todo lo que necesita un hombre para triunfar. Posee ingenio, inteligencia y grandes ideas. Sin embargo, no dispone de lo más importante para conseguir su objetivo. El soporte económico necesario para desarrollar su gran potencial.


Educado en el servilismo desde que solo era un niño, su máxima ambición es encontrar un jefe rico que le permita salir de su aldea natal y escapar del opresivo control familiar. La ocasión perfecta se presenta de manos del terrateniente de la aldea, que está buscando un chofer para su hijo Ashok, un joven que ha pasado gran parte de su vida en Estados Unidos y que parece tener ideas más progresistas que las de su familia. Balram sabrá embaucarlos con su astucia e ingenio, consiguiendo el ansiado puesto de chofer que anhelaba y de este modo iniciara en una estrecha relación con Ashok y su novia Pinky.


No obstante, no es oro todo lo que reluce. A pesar de parecer un poco más respetuosos, abiertos y progresistas que su entorno, Ashok y Pinky tampoco le ofrecerán a Balram la oportunidad de cambiar el rumbo de su vida. Obligado a soportar constantes faltas de respeto, maltratos, vejaciones y humillaciones ira elucubrando una venganza perfecta que adormecerá bajo una sonrisa obediente.


‘’Tigre blanco’’ nos dice que en un sistema capitalista y clasista donde el pez grande ha de comerse al pequeño para prosperar, no hay sitio para sentimientos tales como la honestidad, la bondad, la generosidad o la empatía. Solo triunfa el más despiadado o lo que es lo mismo, solo prospera el canibalismo colectivo. Engullir al otro para adoptar su forma de vida. La única escapatoria posible consiste en mancharse las manos antes o después. Es inevitable no recordar en este punto a la aclamada ‘’Parasite’’ y es que ‘’Tigre blanco’’ es para la India lo que ‘’Parasite'' supuso para Corea del Sur. Una historia de personajes marginales que deben subsistir mediante engaños y tretas y a los que la sociedad no les ha dejado otra opción para poder sobrevivir.


La cinta nos regala grandes frases para el recuerdo como la que pronuncia Balram cuando ve por primera vez a un tigre blanco y además posee un estilo narrativo sofisticado y lleno de lirismo. Con un marcado tono de comedia negra y drama social, su primera parte está impregnada de sarcasmo e ironía, mientras que la segunda se vuelve un thriller oscuro. ‘’Tigre blanco’’ es una propuesta arriesgada e innovadora que nos deja una reflexión sobre el cruel sistema de castas de la India, donde el nacimiento determina quien vas a ser el resto de tu vida. Del mismo modo, también nos ofrece una moraleja que nos dice que el destino no está escrito y que podemos cambiarlo cuando queramos. Tan solo hace falta aprovechar la ocasión perfecta y carecer de escrúpulos.


Es inevitable no empatizar con el personaje de Balram aunque caiga en la vileza de los que lo oprimen en algún determinado momento. Y es que desde el minuto uno, experimentas la agonía que padece cada vez que tiene que encajar un golpe o soportar una vejación con una sonrisa fingida que mas que felicidad, transmite la tristeza y la angustia más absolutas.


No será la película del año pero se convierte en un film muy interesante.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Nadja
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow