Media votos
7,0
Votos
5.571
Críticas
691
Listas
41
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de RAMON ROCEL:
8
8,3
9.479
Serie de TV. Drama
Miniserie de TV de 13 episodios. Claudio, Emperador de Roma, viendo aproximarse el final de su vida, decide escribir la historia de su familia (dinastía julio-claudia) desde el año 50 a.C. al 50 d.C. La Sibila ha profetizado que esta historia llegará a la posteridad. Adaptación del texto del célebre escritor e historiador Robert Graves, y que presenta, con finas dosis de humor y un toque de inocencia, al emperador Claudio y su visión de ... [+]
4 de octubre de 2010
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
El imperio del mal, como víbora acechando, seduciendo al hombre, a embriagarse de placer. Sobre el mosaico de las emociones humanas. Y la esfinge de un hombre “idiota”, se cristalizó con la llegada al poder de Claudio.
Esto es lo que visualizó Graves. Adaptada para la BBC. Esta serie es teatral y deliciosa. Política y cruel. Sin respetar parentescos. Traición y asesinato son el arma de esos malditos envenenados de ambición y poder.
Imperio donde resaltan personajes como Livia, como la promiscua Mesalina. Un imperio donde Claudio no era tan estúpido como se suponía, y sus sueños de estadista se concretaban, y escribía sus memorias porque no dejaba de ser al final un viejo que sangraba con cada maquinación infernal de las víboras de su entorno familiar y político.
En “Yo Claudio” los grandes decorados y los alardes técnicos quedan en segundo término para dar paso a la fuerza interpretativa de los actores que sin sobrades, están a la altura de esta obra biográfica.
Los británicos han sido sometidos por un personaje como el emperador Claudio. Y sus actuaciones en esta serie son inolvidables.
Séneca y Tácito le recuerdan como el hombre más poderoso del mundo, como un semidiós que se ocultó tras un disfraz de defectos.
Esto es lo que visualizó Graves. Adaptada para la BBC. Esta serie es teatral y deliciosa. Política y cruel. Sin respetar parentescos. Traición y asesinato son el arma de esos malditos envenenados de ambición y poder.
Imperio donde resaltan personajes como Livia, como la promiscua Mesalina. Un imperio donde Claudio no era tan estúpido como se suponía, y sus sueños de estadista se concretaban, y escribía sus memorias porque no dejaba de ser al final un viejo que sangraba con cada maquinación infernal de las víboras de su entorno familiar y político.
En “Yo Claudio” los grandes decorados y los alardes técnicos quedan en segundo término para dar paso a la fuerza interpretativa de los actores que sin sobrades, están a la altura de esta obra biográfica.
Los británicos han sido sometidos por un personaje como el emperador Claudio. Y sus actuaciones en esta serie son inolvidables.
Séneca y Tácito le recuerdan como el hombre más poderoso del mundo, como un semidiós que se ocultó tras un disfraz de defectos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
“Yo fui un semidiós pagano que se escondió tras la piel de oveja maltrecha y arruinada, pero dentro de mí, estaba el lobo. Y esperé el momento adecuado para convertirme en amo del mundo. Un semidiós que vivió en tiempos de Augusto y Nerón”