Para la época donde todavía no estaba demasiado explotado en los thrillers con tintes sobrenaturales todo el tema de los los muertos ayudando a los humanos a resolver sus propios crímenes. Acá la película no sabe muy bien como componer todo lo que quiere contar, por un lado la frustración de Tom por no haber podido triunfar en la música y tener un trabajo mediocre que no lo satisface, todo ese lado queda a medias, o solo lo usan de excusa, luego no resuelven nada en ese sentido, la vid de Tom va a seguir siendo una mierda ¿quien sabe? tampoco es que queda bien claro su relación con su mujer, la que creo que no solo la presencia del espíritu empezó a perturbar, pero también lo dejan de lado, supongo que en la novela debe estar mejor desarrollado.
Es entretenida, respira ese aire festivo o alegre que había a finales de los 90, como si todo fuera a ir mejor, ja.
Interesante la resolución en su momento, hoy en día ya se ha convertido en un cliché de películas para la televisión y series.
A Kevin Bacon no me lo creo en su papel de hombre trabajador, se ve sobreactuado, incomodo, no era el indicado para ese rol.