Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Antonio Morales:
6
Drama Un matrimonio del norte de humilde condición suspira por tener un hijo, pero el destino les da una niña. Poco tiempo después, sin embargo, nace el ansiado varón. Un hecho terrible hará que madre e hija no se hablen durante quince años. (FILMAFFINITY)
24 de septiembre de 2016
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
La vida hay que aceptarla como se presenta, no es un capricho ni una elección la llegada de un bebé, es absurdo obsesionarse, mucho más cuando vas a tener la responsabilidad de ser padre o madre, la familia es la institución irreemplazable que se erige en el centro neurálgico de la vida cotidiana del ser humano. Sobre todas esas premisas, tan lógicas como obvias, un joven cineasta proyecta una mirada amarga sobre una relación madre-hija en una ciudad del norte de España. Hace 25 años se estrenaba esta opera prima de Juanma Bajo Ulloa, ganando el Festival de San Sebastián, con cierta división de opiniones. Un drama familiar desgarrador y de una dureza atroz, un film en mi opinión, tan original como inmaduro, tan ambicioso como desigual por un guión algo desequilibrado.

Estamos ante una radiografía del dolor interior a través del relato familiar de un matrimonio humilde. La forma de visualizar ese dolor de los personajes es lo que el cineasta se propone mediante una angustiante puesta en escena, austera, opresiva y cargada de cómplices silencios y miradas displicentes. Una mirada infantil profunda e inquietante, como la historia que esta permanentemente lastrada por la incertidumbre, la tristeza y la fatalidad. Estructurada en dos partes bien diferenciadas: la niñez y años más tarde la juventud de la desdichada Ami. Cuenta un viaje introspectivo de una niña no deseada, huérfana de amor materno, de un frustrante aislamiento emocional, de escasa relación afectiva familiar, ensimismada en un mundo huraño, pintando mariposas en la infancia y rodeándose de adulta con otros insectos repulsivos. La evolución de un ser inocente carcomido por el rencor y la indiferencia que llega a límites insospechados de aberración psicológica.

El cineasta logra que los elementos melodramáticos que intervienen en la trama, den paso a una profunda y emotiva mirada poética que constituye sin duda lo mejor de la película (spoiler). Los actores son un gran hallazgo por el film, la humanidad de Gabriel, el padre (Tito Valverde), la cerrazón de Carmen (Silvia Munt) como una obsesionada madre y los penetrantes ojos azules de la niña Sandra García. Sin duda, Ulloa fue uno de los realizadores que mejor irrumpieron en nuestro cine, de gran imaginación y creatividad, pero su trayectoria ha ido de más a menos, poco a poco ha ido decepcionando cada vez más.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Antonio Morales
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow