Simplemente, me ha encantado, mucho más que Chihiro, opino que El Castillo Ambulante es mejor, derrocha más fantasía, pero esta me ha parecido especial:

-Una historia simple, pero bonita y amena, fácil de coger.
-Hayao consigue crear un entorno leal y precioso, muy buenos dibujos, al igual que los fotogramas de estos.
-La faceta imaginativa existe, es palpable, pero quizás no es tan enorme como podemos hallar en otros de sus trabajos, la fantasía se mezcla con la naturaleza, haciendo que esta sea mágica y solida, quizá intenta mostrarnos como debemos verla realmente.
-Totoro, personaje pintoresco a lo "cine mudo" junto otros secundarios de fantasía, que solo las protagonistas pueden ver porque el se deja, pura magia, formidable.


Una de las películas más consagradas y bellas del anime, y más particularmente, de Hayao.