Los agentes del destino

¿Qué harías si supieras el destino está escrito? Y, mejor aún, ¿qué harías si sabes que serás el Presidente de Estados Unidos de Norteamérica a costa de perder al amor de tu vida? Interesante, ¿no?

Matt Damon y Emily Blunt nos llevan de la mano en ésta historia de amor, que se desarrolla en Nueva York, aunque toda la película parece una mezcla locotrona de "El origen", "Un ángel enamorado", "Matrix", "El efecto mariposa", "El Show de Truman" y cuanta película que hable sobre el futuro predestinado y que alguien "todopoderoso" nos controla.

No es la mejor película que he visto, pero es entretenida. Pasé un buen rato distraído, pues tiene suficientes giros y sorpresas que mantuvieron mi atención.

Lo mejor: Emily Blunt quedo perfecta en el papel, además que es hermosa.
Lo peor: Matt Damon no encaja del todo en el papel; en las escenas de "acción" esperé ver a Bourne atacando.

"Destino oculto" es un thriller con elementso de ciencia ficción. Matt Damon, un aspirante a senador con mucho éxito, se enamora de Emily Blunt, una bailarina del populacho. Se podría resumir que es una historia de amor entre ambos protagonistas, pero es una historia de amor muy bien llevada, no de esas de las comedias románticas donde todo es bonito y rosa, sino una creíble y sin mucho sentimentalismo de por medio.

Luego llega la parte de ciencia ficción. A algunos puede sorprender y pensar que todo eso son patrañas y les resultará imposible de creer. La ciencia ficción de "Destino oculto" es realista, no hay láseres ni trajes de invisibilidad, "tan sólo" puertas que llevan de un lugar a otro y hombres que controlan el destino de la Humanidad. Puede sonar muy rimbombante, pero la película lo presenta con total naturalidad en un escenario conocido por todos, Nueva York, una Nueva York de postal, de turista.

Quizás George Nolfi no haya conseguido la genialidad con su primera pelícua, pero ha dirigido una con gran fluidez, naturalidad y maestría. Tiene un mensaje un tanto manido, pero el film consigue su objetivo de entretener.

Tiernísima película ideal para las mediodías del finde sin muchas ganas de siesta.
Lo más interesante y no diré más me pareció lo de las puertas y el ratito que aparece Terence Stamp, una de mis debilidades en esto del cine.

Obviando algunas incongruencias (la verdad es que es complicado salir de ese jardín) la pelí se deja ver y acabas dando un besito con mirada de complicidad a tu pareja si la tienes al lado.
Deja buen regustillo.

Cuesta hablar de esta película sin caer en el spoiler, pero ha conseguido sorprenderme. Para bien. Pensaba que una película de ‘chico conoce chica’ sólo podía entrar en las categorías de comedia romántica o drama romántico y “Destino Oculto” termina siendo una cosa extraña que fusiona lo romántico con algo que sólo acierto a considerar como ‘thriller paranormal”. Y funciona de miedo porque en el plano sentimental la química entre Matt Damon y Emily Blunt es perfecta y porque en dimensión mística ofrece elementos y conceptos no cien por cien innovadores, pero sí atractivos, poco trillados y bien ejecutados.

Y es que, curiosamente, el plan o destino oculto de la película no se mantiene oculto hasta el final como suele ser lo habitual sino que, no sé si por pura suerte o por un golpe de genialidad, se revela a los veinte minutos de empezar y, lo normal, es que deje primero con la boca abierta y luego con una gran sonrisa de “ostras, que bueno”. Efectivamente, los malos son demasiado buenos y revolucionarios como para desaprovecharlos en el típico final de traca, así que aparecen constatemente en la película luchando abiertamente contra la pareja. Esa continua pelea entre algo que podríamos considerar como amor y algo que podríamos considerar como destino no sólo está narrada de una manera fascinante, sino que está ejecutada en una atmósfera que provoca desasosiego con sus tonos azules y su ambiente irreal, que al principio parece casualidad pero luego vemos que es talento. Y todo a medio camino entre lo real y la ciencia ficción, unidos por una difusa frontera que pocas veces he visto tan atractiva y el que es tan fácil entrar.

Contra el plan oculto lucha Matt Damon, que aparte de su talento, siempre aporta frescor y juventud - sus personajes nunca parecen tener más de veinte años- y Emily Blunt, que siempre aporta su encantadora fascinación. Y contra la pareja luchan un montón de caras conocidas que se meten perfectamente en la piel de sicarios del plan para, entre todos, dar vida convincentemente a la eterna lucha entre destino y libre albedrío de una forma entretenida y emocionante.

Lo dicho. Ante todo innovadora y sorprendente. Y además entretenida y muy agradable de ver. Bonita y optimista. Deja un poso de buen rollo.

Falta de ideas. Destino oculto se resume en estas tres sencillas palabras.

Por otro lado, Destino oculto es tan ridícula que no merece la pena perder nuestro valioso tiempo en verla o realizar una crítica exhaustiva sobre ella.

Sin más dilación, me remito a spoilers.