Me quedo contigo

Desagradable filme construido en base a desatar una sorprendente violencia sin venir a cuento. La dirección de Artemio es entre notable y sobresaliente. Ahora bien, la historia contada aquí tiene mucho que reflexionar y digerir. Yo se la recomiendo a las políticas, funcionarias y numerosas institucionalizadas que en España han establecido la llamada «ideología de género», según la cual en las relaciones entre hombres y mujeres los desmadrados y desconsiderados de este mundo, a priori son siempre y antes de que quede demostrado los varones.

La lección que extraigo de esta tremenda película es aquello que ya pensó en su día Hannak Arendt en sus «Ensayos de Comprensión», esto es, que resulta bastante obvio que los seres humanos tan antirreligiosos, tan anti formación religiosa, tan anti enseñanza religiosa en las escuelas, cada vez más influyentes de nuestra «progre» civilización actual, que han perdido la fe en el Paraíso de la escatología religiosa, no son capaces de erigir un paraíso aquí en la tierra; y del mismo modo, resulta bastante claro que los que han dejado de creer en el Infierno de la escatología religiosa no son capaces de erradicar de este mundo tantas imitaciones de infierno como existen.

Fej Delvahe

Esta es la película que más me ha impactado de las vistas en el Festival de Sitges 2015.

No la que más me ha gustado: la que más me ha impactado. Como ver a alguien partirse la boca contra el suelo.

Primer largometraje del artista plástico Artemio Narro, no es una peli al uso.

*(Texto en zona de spoiler. Pero lo pueden leer, porque lo de menos es el spoiler. Aunque sí revelo lo que pasa en la segunda mitad de la peli; así que supongo que sí es un spoiler gordo. Pero vamos, que yo creo que lo pueden leer. Porque si no lo leen, a lo mejor no aguantan hasta la segunda mitad de la película, y se levantan y se van. Y si aguantan, estarán preparados para la segunda parte; y si no están preparados, muchos se levantarán en la segunda parte, y a lo mejor algún incauto sale traumatizado. No sé, yo creo que lo pueden leer)

Una película francamente chocante, que por una vez muestra a la mujeres **(cachito en zona de spoiler, por si acaso; perdonen las molestias) , en lugar de lo más habitual, que es lo contrario.

¿Mad Max Fury Road, un film feminazi, decían? Ja, ja.

La película “Me quedo contigo” de Artemio Narro recuerda las propuestas del director austriaco Ulrich Seidl, como ocurre en "Import/export" o (1)"Paraíso: Amor" donde las imágenes pueden arrancar sentimientos de asco físico y mental de un espectador sensible. Películas que pueden provocar náuseas y vómitos porque hay secuencias deshumanizadas. La película que comentamos se encuentra en este punto entre un gore vomitivo y un gesto reivindicativo de poder por parte de la mujer que, en este caso, puede ser tan cafre como en otras ocasiones lo es el hombre. Las imágenes más bien parecen surrealistas y poco probables por no decir nulas en un mundo civilizado, aunque nunca se sabe hasta qué punto puede llegar el atrofiamiento humano.
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Es verdaderamente notable encontrar una película tan desagradable como esta. Casi todas por malas que sean tienen algo bueno, algo que reseñar a por muy mala que sea. No pasa lo mismo con esta, ni fondo ni forma, tiene un pase. Lo que me inquieta es que puede haber en la mente de quien la hizo, no entiendo el propósito de hacer algo tan, feo, cruel, violento y desagradable, sólo una mente perturbada puede disfrutar con esta bazofia, miserable donde cuatro mujeres disfrutan, secuestrando, violando, humillando y finalmente matando, como una actividad más de diversión tal como ir al cine o cenar con amigos. No se trata de enfermas que se escapan de un psiquiátrico sino mujeres, " normales" , a las que por supuesto ni que decir tiene no representan. Yo trataría de evitar que apareciera en mi curriculum si hubiera participado en ella.

Viernes 27 de mayo, Cineteca Nacional 7:30 pm. La cinta de Artemio Narro "Me quedo contigo" es un producto metamórfico, el cual está compuesto por un planteamiento afable que tomará a la audiencia desprevenida para conducirla gradualmente a situaciones excedidas, así, vamos de lo prosaico a lo atroz suficiente para incomodar a los espectadores y dejarlos atónitos al concluir el metraje.

Narro aprovecha muchos aspectos que confieren a la realidad de un México incrédulo en prácticas de justicia y legalidad, para mostrar en estado de pureza “putrefacta” la impunidad asumida por los hijos de la clase privilegiada, la cual se acentúa cuando éstas se encuentran al cobijo de la lacra política, quien impostada en la curul y con falsos discursos da paliativos a la opinión pública sobre cuestiones que agravian a la sociedad.

Pero no sólo de la impunidad —implícita— se nutre esta ficción, sino también de los gustos, vicios, excesos y atropellos con que estos grupos dan rienda suelta a su alter ego de fin de semana, el cual primeramente se fortalece por el anonimato que brinda la noche, para después alardear acerca de las concesiones que su posición social les otorga. Como es de suponer la discriminación social o racial es otro de los síntomas del dominio de la clase pudiente dentro y fuera del filme, por lo que la actitud bromista o dicharachera no excusan la aplastante postura de las yuppies en cuestión.

El argumento va sobre la reunión de tres amigas para descansar un fin de semana en alguna provincia a la Ciudad de México, a ellas se les une Natalia, una joven de origen español de visita en nuestro país por cuestiones de noviazgo y la vez de descanso. Sin embargo la personalidad arrolladora y a la vez pintoresca de Valeria, dará pauta a las inquietudes de las tres anfitrionas para vivir situaciones extremas en la siguiente noche, esta vez de antro. Una vez enfiestadas y sin proponérselo rolarán su posición y emplearán no sólo los deterioros del sistema, sino el poder de género sobre su contraparte, dando una muestra que rompe con aquello del sexo débil.

Una película con discurso sumamente hembrista, su trasfondo social es oportuno para la construcción de personajes mejor planteados que argumenten los actos de las ahí presentes y aventajar eso de violencia gratuita. Dicho calificativo se enfatiza por su alto contenido explícito, donde el proyecto se retiene con planos extensos que decaen seguidamente una primera parte, que jocosa funciona bien.

De género poco explorado en nuestro país, "Me quedo contigo", es más lograda que mucho cine comercial de susto facilón, del que su creador puede seguir revisando en mejoras de proyectos futuros que le permitan tener en circulación más copias y por tanto ir ganando adeptos.