Me levanté temprano el día de mi muerte

Y hablo tanto como creador, como espectador. Verse esta rareza simpática aunque caótica y a veces ininteligible, va como mínimo a provocar que os hagáis algunas preguntas. La primera... ¡¿A quién se le ocurrió esta mierda?! ¡Ostras, a Ed Wood, ni más ni menos!

Vale, pero quién se lanzó a grabar un guión de Ed Wood veinte años después de muerto... Un tal Aris Iliopoulos. ¿Quién será? Nadie lo sabe.

Pero lo más desconcertante es que en este largometraje de notoria carencia de presupuesto (estoy convencido de que nadie percibió un dólar) es reconocer a tantísimos rostros famosos, algunos incluso míticos perfectamente predispuestos a este experimento desconcertante, angustioso, ambiguo y difícil de captar... como era el cine de Wood, vaya.

Pues eso, que veréis como protagonista a Billy Zane –el malo de TITANIC- cruzarse con medio Hollywood, como un vendedor de perritos calientes encarnado por Mark Rolston –el gay de CADENA PERPETUA-, un predicador alucinado interpretado por Will Patton –el de cara de buenazo en ARMAGEDDON- y mil personajes sin mucho sentido con las caras de Ron Perlman –HELLBOY-, Tippi Hedren –LOS PÁJAROS-, Christina Ricci –la amiguita de CASPER-, Tara Reid –la rubia de AMERICAN PIE-, John Ritter –el padre de ESTE CHICO ES UN DEMONIO-, Eartha Kitt –Catwoman en la serie de BATMAN de los ’60-, Taylor Negron –el malo de EL ÚLTIMO BOY SCOUT-, Steven Weber –Jack Torrance en la nueva de EL RESPLANDOR-, Sandra Bernhard –la mala en EL GRAN HALCÓN-, Ricky Schroder –el niño rubito de CAMPEÓN-, Kathleen Robertson –la buenorra de SCARY MOVIE 2-, Jonathan Taylor Thomas –uno de los hijos de UN CHAPUZAS EN CASA-, Carel Struycken –el mayordomo gigantón de LA FAMILIA ADDAMS-, Andrew McCarthy –el niño pijo de LA CHICA DE ROSA-, la mismísima Vampira de las pelis originales de Ed Wood, y unos cuantos más que me dejo. Bravo por el casting.

En la sabelotodo red de redes ni una pista acerca de la producción de esta cinta sin parangón, y mis pocas luces me inclinan a pensar que el tal Chris Hanley y Billy Zane (parece que los productores) convencieron a sus amiguetes actores (y supongo que también a los técnicos) para llevar a cabo esta cosa extraña en una semana. Y hala, peli al canto.

Les dicen que cobrarán poco o nada, pero a cambio no tendrán que aprender diálogos, ya que la película es “muda”. Si bien la banda sonora acompaña muy correctamente a la acción. El único pero que le pongo a esta sobrada de ‘el hombre enmascarado’ es que muchas veces parece que intentan hacer mal la peli adrede. Y él no es mal actor, es un (muy) buen actor haciendo de mal actor. La obra de Ed Wood era recordada, entre otras cosas, por llevar en su elenco a actores pésimos o, mejor aún, a no actores. En ese sentido, este guión no es totalmente fiel al espíritu de nuestro travesti favorito, ya que ME LEVANTÉ TEMPRANO EL DÍA DE MI MUERTE... está bien hecha.