La ciudad de los prodigios

La verdad es que siempre cuesta más valorar bien una película después de haber leído el libro. También es verdad que el libro es difícil de llevar al celuloide, u(na vida completa y llena de actividades), pero se hizo en el Padrino ¿No?. Es una versión bastante libre, otra cosa es que si uno no se ha leído el libro posiblemente no se entere de la película, en muchos momentos inconexa, lenta, con acción sin acción, y con ese actor de terracota que es Olivier Martinez, posiblemente el único actor del mundo con menos expresividad que una estatua del románico.

La película no es mala. De hecho es pasable... pero teniendo en cuenta que la novela en la que está basada es soberbia pues, claro, decepciona bastante.

Toda la tensión dramática, interés del argumento y trama que tiene la novela ha intentado condensarse sin éxito en la película. Como resultado si alguien no ha leído la novela se perderá, no dará importancia a detalles que la tienen o le dará demasiada a hechos triviales. Por el contrario, aquel que haya leído la novela de Mendoza se quedará con una impresión de "pudo ser pero no fue"

En definitiva, si eres un loco de Mendoza y te gustó la novela, puedes verla por el interés de ver reflejada en imágenes esa obra maestra de la literatura... Si no la has leído, es totalmente prescindible.

Ah, concuerdo con la otra crítica en cuanto al protagonista, Olivier Martínez: podrían haberle sustituído totalmente por un muñeco de cera o haberle recreado por ordenador.... seguro que con cualquiera de las 2 opciones habrían conseguido más expresividad. De hecho, ¿no tiene exactamente la misma cara/gesto en el anuncio de perfumes que protagoniza?

A veces, cuando alguien dice una tontería, se suele decir "qué oportunidad perdió para callarse"; y eso mismo pensé cuando ví por primera vez la película de Camus inmediatamente después de haber leido la magistral obra de Eduardo Mendoza, 20 años después he vuelto a repetir la experiencia, primero me releí el libro y lo sigo considerando una obra maestra de la narrativa española de la segunda mitad del siglo XX, y a continuación revisé el film, y, la verdad, me sigue pareciendo una de las peores películas de la historia de España. Y eso que el libro está narrado casi con guión cinematográfico, y para su adaptación el director solo tenía que hacer creibles los personajes de los cuales apenas se salva la voluntad y el estilo de Emma Suárez, si bien su rol en la película es muy distante del otorgado a Delfina en la novela, otra cosa que el director tenía que hacer era poner orden y escenificar una película que hasta podría funcionar como saga, pero ni eso supo hacer Camus que se pierde entre la literalidad de la novela, imposible de resumir en algo mas de 120 minutos, y en los aportes propios del guión que destrozan aún más el resultado. En resumen, Camus perdió una oportunidad de oro para darse un descanso o hacer otra cosa.