What's Wrong with Secretary Kim (Serie de TV)

El día que la Secretaria Kim Mi So anuncia a su jefe, el vicepresidente Lee Young Joon, que tras nueve años trabajando juntos quiere dejar el trabajo, su mundo parece derrumbarse y hará todo lo posible por retenerla, incluso decirle toda la verdad o mantener una antigua promesa. Esto destapará muchos sentimientos no expresados y revelará cabos sueltos en la vida de los protagonistas que llevaban tiempo necesitando ser solucionados.

Este dorama tiene muchos momentos ñoños e infantiles y no es apto para quien no tenga una alta tolerancia al azúcar. Personalmente me ha gustado y me ha hecho reír en muchas ocasiones, sobre todo con las subtramas. Especialmente con la de la ciclotímica extravagante de la oficina y su "my hero".
Puede resultar empalagoso con tanto dulzor y hasta cargante con tanto uso de efectos sonoros acompañando la emoción de los actores. Sin embargo, yo lo he disfrutado, se me ha hecho ligero y me ha sorprendido la manera impecable en la que se resuelven los cabos sueltos del trauma de los protagonistas y en lo bien que se desarrollan las numerosas subtramas alrededor de la oficina.

Respecto a los actores, me gusta cómo está creciendo Park Seo Joon como actor. Me llamó la atención en "Midnight runners" y ya van varios doramas que desarrolla de manera muy creíble. No puedo decir lo mismo de Park Ming Young, que, aunque elegantísima y correcta, se me ha hecho difícil sentir simpatía hacia su actuación, quizá excesivamente rígida.

¿Qué le ocurre a la secretaria Kim?' es una serie blandita, agradable y sencilla. Fácilmente, y con razón, se le puede tildar de ser excesivamente romántica y dulzona, pero ahí está su mayor baza. En contraposición con otros kdramas que te dejan bastante tocado, he aquí un pequeño oasis felicidad que te dejará satisfecho gracias al buen rollo que transmite y los buenos sentimientos que deja en el espectador. Objetivamente tiene cosas criticables pero como es justo lo que buscaba estoy muy satisfecho con el resultado final. No me han interesado mucho las tramas secundarias que casi he obviado, pero compensa con su pareja protagonista y un final a la altura de lo esperado.

Muy recomendable si un drama romántico que te deje con muy buen sabor es lo que estás buscando.

¿A qué se debe el éxito internacional del manga surcoreano (manhwa) «¿Qué le pasa a la secretaria Kim?».

Puede que haya varias claves. Una, la idea de amigos antes que amantes: de alguna forma, «¿Qué le pasa a la secretaría Kim?» trata de un noviazgo de nueve años, o incluso de toda la vida si nos fijamos detenidamente; Young-joon se enamora de ella sin que Mi-so sienta la presión y el estrés de querer que se enamoren de ella. No se pasa por el miedo a quedar mal, a decepcionar a alguien, a fracasar o a no encajar. Dos, el ser conquistada y adorada: Mi-so es un personaje pasivo que recibe toda clase de atenciones y declaraciones de amor, repito que sin ningún estrés; que el hombre vaya detrás de ti, además un hombre ideal guapo y multimillonario, es una fantasía clara y recurrente.

Estas ideas combinadas pueden ser buenas o malas, pero aquí el resultado es pésimo. Se han pasado de la raya con el manejo de los tiempos hasta el punto de perder todo el romanticismo. No me creo que un hombre esté nueve años pegado a la mujer que ama (¿o se enamora a los nueve años? Aún peor) sin que lo demuestre en ningún momento y, no solo eso, sino teniendo un trato egoísta, egocéntrico, frío, distante y casi esclavista en el trabajo. Ella está tan harta de todo esto y de él, que no se nos olvide, que decide irse de su puesto de secretaria para poder tener una vida. Son nueve años de conocerse y tratarse, nueve largos años. Se trata de justificar esta anomalía con un trauma del protagonista que en mi opinión no es excusa para nada, al contrario. Si quieres a una persona, actúa y no te quedes como un pasmarote dejando el tiempo pasar sin saber qué sientes ni qué deseas, y sin tener en cuenta en ningún momento los deseos de la otra parte. Hijo, ve al psicólogo, que lo necesitas.

Así, los dieciséis episodios se vuelven tediosos. Llega un momento dado en que parece que no tienen nada más que contar y el romance queda retratado con flojera, muchos «te quiero» pero sin nada de tensión amorosa, pasional. No lo ves ni lo sientes. Se pueden acostar que da igual, todo es un trámite de guion. La culpa no es de los actores, más bien diría que es un problema de guion.

Lo mejor son las tramas secundarias, sobre todo la de la jefa de sección Bong y «el héroe»; me partía de risa con ella. Sí quisiera quejarme del casting del director Park: en el cómic era mi hombre favorito, es que me encantaba por guapo, sensato y divertido, pero aquí han elegido a un actor que va solo de gracioso. Decepcionante.

Un jefe narcisista y explotador al que desde un principio se le coge tirria, casi perfecto, crea a una secretaria casi perfecta; la cual solo necesita mirarlo para saber que necesita su vicepresidente.
Kim Miso es una mujer eficiente, considerada y sacrificada, y solo cuando decide dar un giro a su vida, comienza a ser valorada.
¿Realmente es así o hay una causa oculta para todo aquello que acontece?
Esta es una serie muy romántica, rozando la ñoñería. Es una comedia divertida con un misterio por descubrir.
Sinceramente me entretuvo a la vez que me cautivó.
Las tramas secundarias son muy divertidas y encajan muy bien. Casi un cuento de hadas.
Si queréis saber como acaba la historia, tendréis que ver la serie para descubrirlo.
No tiene desperdicio.