Imperium (Serie de TV)

Anoche Antena3 estrenó "IMPERIUM", un "spin-off" (en la habitual jerga anglosajona del mundo audiovisual esto significa que la serie es un derivado de otra anterior con la que puede -o no- compartir personajes y tramas) de la vilipendiada "Hispania", serie cuya primera temporada este humilde televidente puso a caer de un burro en su momento en Filmaffinity por la baja calidad general del producto y los garrafales errores históricos de los que hacía gala.

Por fortuna, parece que en esta ocasión productores y guionistas se han tomado su trabajo más en serio y, a la luz de su primer episodio, la serie destila una calidad mucho mayor que la de su pretenciosa y en ocasiones disparatada predecesora. Ya no hay hispanos con nombres persas o griegos, ni se combate a legionarios romanos tontos de capirote que no saben ni cojer una espada, sino que la trama gira en torno a una serie de intrigas políticas, mezcladas con venganzas personales y bajas pasiones (eróticas) en el marco de una descarnada lucha por el poder en la Roma republicana del siglo II antes de Cristo.

Dentro del conjunto actoral destaca, como no podía ser de otra manera, Lluis Homar en el papel del malvado y astuto Galba, secundado por unos convincentes Pepe Sancho y Jesús Olmedo, que en mi opinión borda su papel de Marco, transmutado de general romano a sangriento gladiador. En el resto del elenco hay un poco de todo, con alguna tendencia puntual a la sobreactuación y cierta necesidad de educación vocal, así como un vestuario demasiado limpio y flamante para la época, y el habitual exceso de iluminación en las escenas de interiores, pero vamos, ni punto de comparación con la infame "Hispania".

Una de las claves que contribuyen a la mayor calidad del producto que nos ocupa es el hecho de que ha sido rodada en el "set romano" de los estudios Cinecittà de Roma, los mismos donde HBO rodase "Roma" hace unos años, y que la productora ha contado con la colaboración de alguno de los asesores de aquella serie. Con ello han podido hacer una buena ambientación con un gasto muy inferior al que cabría esperar en una serie de este tipo. Eso sí, "se nota" que se trata de los mismos decorados de la aclamada serie de HBO y uno se pasa el rato esperando a que aparezcan Lucio Voreno y Tito Pullo por cualquier calle. De hecho, hay al menos un par de escenas directamente "fusiladas" de la serie norteamericana (la del heraldo que anunciaba edictos y reuniones del Senado en el Foro y la del personaje que marcaba el día en el calendario público también en el Foro, al principio del episodio). Parte de la banda sonora también está "inspirada" en "Roma".

Que el presupuesto de "IMPERIUM" es menor que el de "Roma" salta a la vista nada más ver las calles, que aparecían mucho más llenas de gente en la serie norteamericana. Los de la productora Bambú han tenido que conformarse con menos figurantes, pero así y todo la serie merece la pena. Su guión es más adulto, atractivo y elaborado que el de "Hispania" y es una gozada volver a pasear por el set de rodaje de "Roma".

A destacar la cabezera de la serie, una infografía que, a modo de columna historiada rematada por un águila, esboza las andanzas de los protagonistas, acompañada por una estupenda composición musical muy de "romanos".

Lástima que la audiencia no haya respondido de la forma esperada. Sólo un 11% de "share". Quizás debieran haber esperado un poco más para estrenarla, un par de semanas. Todavía hay demasiado adolescente ocioso controlando el mando a distancia.

Lo tenían todo: una escenografía muy realista y cuidada, una fotografía impecable, unos actores inmejorables (Lluís Homar, Nathalie Poza o Pepe Sancho); no obstante descuidaron la trama de la serie, haciéndola bastante aburrida.
Su precuela, 'Hispania' había tenido una sangría de espectadores considerable desde su primera temporada por lo que los malos presagios de su sucesora se cumplieron. La serie no pasó de su primera temporada, dejándose un final abierto.

Pues la verdad, a mí me gustó mucho. No voy a decir lo contrario. Hispania ya me encantó, no me pareció mal filmada en absoluto (muchas de las escenas más épicas eran dignas imitadoras de Ridley Scott... y os lo dice una fan acérrima de Scott) y me entretuvo mucho.

Creo que es injusto compararla con Roma. No creo que tenga nada que ver. Está claro que se ha intentado hacer algo parecido, pero mientras que Roma era un fresco más o menos fiel (o bastante fiel, vamos) a la historia de César y Augusto, creo que en Imperium simplemente se ha cogido la época para contar una historia más de pasiones, venganzas y demás. En ese sentido... pues quién sabe. Lo mismo la inspiración no ha sido tanto Roma como Juego de Tronos, que a su vez está basado en la historia de Roma y la Guerra de las Rosas inglesa. Vamos, que puede haber mil influencias por ahí más allá de la serie de HBO.

¿La ambientación, el vestuario, el habla...? Pues bueno. No le vamos a pedir peras al olmo. La ambientación sí me ha parecido muy lograda. No podía ser de otra forma estando rodada donde está rodada. El vestuario yo me lo he creído. Todo se puede mejorar siempre, pero alude directamente a lo que la gente está acostumbrada a ver, y éso basta. Ya se avisó que no iba a ser una reproducción fiel de ninguna época, así que yo no me escandalizo con ello. El habla se podría mejorar, pero al menos no me ha chirriado nadie hablando con acento parleño, como el Ballesta en Hispania.

Y sobre todo, creo que si la serie no fuese española, a todo el mundo le habría encantado, pero sigue habiendo mucha reticencia a reconocer las cosas que se hacen bien en nuestro país. y sí, to soy la primera en reconocerlo. Yo NO creo que las series españolas estén al mismo nivel que las inglesas o las americanas. Creo que Downton Abbey, Juego de Tronos, Hell on Wheels y Mad Men, por citar sólo cuatro, están a años luz y les dan sopas con hondas a Hispania, Imperium o incluso nuestro Águila Roja. Y no es por el presupuesto, los medios y esas otras cosas con las que los productores se llenan la boca, sino porque los guiones y el diseño de personajes simplemente no cometen las mismas tropelías e incoherencias sangrantes que en España (Con Downton Abbey o Mad Men estoy tranquila, pues sé que no se va a traicionar la esencia de los personajes). Pero sí creo que muchas veces la gente es demasiado injusta con nuestra ficción. Últimamente se están haciendo cosas muy dignas. Queda mucho, muchíiiiiiiiiiiiiiisimo para decir que hemos aprendido, pero al menos se está intentando. Así es como se mejora: intentándolo. Y yo creo que es de aplauso que por fin nos hayamos decidido a salir de la chabacanería y las comedietas tipo Aída para al fin hacer algo decente, más internacional y arriesgado.

Creo que todo depende de lo que se le pida a la serie. Yo a Imperium le pido que me entretenga con sus tejemanejes, que me de de vez en cuando alguna escena poderosa, y que me haga disfrutar con los actores que me gustan. Nada más. Y lo consigue.

Lo malo sin duda es que según avanzan los capítulos, el interés decae, y éso ocurre porque no hay trama, en realidad. Dos familias haciéndose la vida imposible sin más misterio es muy poco para vertebrar una temporada entera. Menos mal que los actores (especialmente Lluis Homar, Pepe Sancho, Jesús Olmedo y Nathalie Poza) dan lo mejor de sí.

Los 2 primeros capítulos han sido buenísimos, me han encantado, ya que han sido trepidantes, intensos y con mucho movimiento. Después, sin embargo la serie fue a menos: ha perdido chispa y prácticamente toda la acción: se fueron enrollando con las tramas y no las resolvían del todo, lo que creaba algo de frustración. Se ha vuelto más oscura y pasiva, y el último capítulo como final de temporada es bastante flojo, imaginaros si es ya de serie. Aún así si hubiera segunda temporada la vería.

Un apasionante planteamiento sobre la mafia romana entre dos "capos" patricios que podía seguirse sin necesidad de haber visto previamente "Hispania", con interpretaciones convincentes, con unas mejores vocalizaciones de los actores y rodada en los míticos estudios italianos Cinecittá presagiaban una estupenda serie.
Sin embargo, pese a enfrentar al ya "monstruo" Lluís Galba Homar con otro dignísimo oponente de su talla, José Quinto Sancho (aunque éste suene más a español que a latín), los guionistas no aprendieron y volvieron a confundirse en el error perseverante de no supervisar los tratamientos entre los personajes. Muy correcto que los esclavos llamen a sus amas "domina", pero... ¡el usted no existía! Eso por no hablar de algo más grave que viene repitiéndose lamentablemente en muchas ocasiones: Que un hijo se dirija a sus padres en la misma escena con el "tú" y con el "usted" (y si se descuidan, con el "vos"). Otra cosa es, por ejemplo, que Marco o Sabina diferencien a sus interlocutores según la situación social en la que se encuentren en cada momento.
Y lo peor de todo que le impide destacar. Gastaron demasiado presupuesto esperando una enorme audiencia y, al no lograrla, dejaron de rodar sin concluir bien todos los entramados. Aunque eso, evidentemente, no fue responsabilidad más que del director y de los guionistas.
Mi nota: 6,8