Guillermo Tell y el payaso (C)

Méliès, como nadie, sabía asombrar a aquellos espectadores que acudían atónitos a las salas de proyección antes de que el siglo XIX hubiera terminado.
Convertir la ficción y la realidad en una mixtura asombrosa e increíble, fue durante mucho tiempo un ámbito propicio para el director francés. Él aportó infinidad de recursos técnicos y materiales al progreso de aquel invento misterioso que, por entonces, iniciaba su andadura.

Los caminos del arte cinematógráfico no se habrían podido escribir sin obras como esta.

Ya pasado pocos años de sus primeros inicios en el cine, en esta película de 1 minuto, sigue utilizando las mismas técnicas: humor y corte como efecto especial. Desgraciadamente, por el tipo de truco (cambiar muñeco con persona) el cambio se nota mucho, aunque supongo que ya lo sabían y hacen que después del cambio haya mucha acción para evitar que se note.

Sí que hay mucha violencia en este corto, pero quizás quieran exagerar la comedia y aprovechan el cambio de "persona-muñeco" para crear más acción.