Pocas series desde que acabase la infame "Lost" han levantado tantas discrepancias. Y es que TWD es una serie con un enorme fanbase, pero con muchísima gente que la denigra y la pone a parir.
Para muchos no salen los suficientes zombies y es muy lenta, y para otros, es una herejía montar un drama psicológico con zombies como decorado.
A mí, personalmente me parece una serie enorme, que ha tardado en encontrar el equilibrio entre drama y acción post-apocalíptica, pero que lo ha hecho, sobretodo a partir del final de la mind-season de la cuarta temporada con la muerte del gobernador.
Es imposible no sentir simpatía por personajes tan humanos, tan débiles y tan fuertes como, por ejemplo Carol Peletier (merecedora de un Emmy, Mellisa McBride, por ese papel) o ese Rick que, tan pronto parece perder los papeles y caer en la locura, como se esfuerzo por evitarlo.
La serie juega como ninguna al gato y al ratón con quién será el próximo en caer. La decisión de separar la trama de la de los cómics, por mucho que a algunos no les guste, ayuda a aumentar la incertidumbre.

Lo peor es sin duda la actuación de Chandler Riggs como el hijo de Rick.Un actor inexpresivo que en los últimos 20 capítulos apenas sale. Sin duda Kirkman se ha dado cuenta de que el chaval no es buen actor. amén que el estirón que ha pegado no le favorece al papel. Una pena porque en los cómics tiene su momento trágico, que difícilmente se atreverán a intentar en la serie con este actor tan inexpresivo.

1ª temporada: 8
2ª temporada: 6
3ª temporada: 7
4ª temporada: 7
5ª temporada: 8
6ª temporada: 8 (de momento para mí la mejor)

TWD ha dado momentos impactantes que sus seguidores siempre recordaremos: