Martes 17 de febrero, 6:45 pm, Cinéteca Nacional. Con una idea original acerca del tópico de la homosexualidad en las etapas de la vida, Sergio Tovar Velarde, se enfoca en cuatro casos —nombrando y estrechándolos metafóricamente con las cuatro fases lunares—; así "la nueva" será estelarizada por un niño, el cuarto creciente por una pareja de jóvenes, la correspondiente al cuarto menguante a un adulto mayor y la llena por otra dupla de maduros en convivencia marital, esta última por ser clara y no mantenerse oculta socialmente.

La incipiente trayectoria de Tovar Velarde con esta segunda cinta tiene un enfoque interesante, el homosexualismo con distintas perspectivas, dadas por la edad principalmente, en la que a pesar de contar con una idea fragmentada por episodios, se nota cierto desequilibro en su conjunto. Con lo anterior hay una fijación un tanto superflua hacia las parejas tanto juvenil como madura y olvida por instantes los asuntos de infancia o vejez asediados por el deseo, la frustración, el miedo o bien el desconocimiento del placer dadas las condiciones socio-familiares. La cinta va con una constancia de clichés que termina uno recriminándola, por ese víctimismo inminente en todos los casos para tornarla en melodrama de tarde-noche, que sí por discurrir, pero a simple vista sin ningún suceso establecido contundente.

Muchos de los interpretes son debuts, algunos otros alcanzan notoriedad con el estelar de "Cuatro Lunas"; se importa la presencia de un español poco natural, forzado e incomodo. Otros actores en reparto que tampoco fortalecen a los personajes, el caso de Marta Aura con Alonso Echanove, lo cual para este episodio revela una falta de trabajo en delineación de personajes que posiblemente fue coartada por costumbre e incluso las apariencias. ¿Qué pasó aquí?

La cinta trata de desapegarse de los prejuicios sociales en México, e irrumpe con escenas que si no escandalosas, tampoco le conceden el agregado que la coloque en el podium de reconocimientos.

Cine que por arriesgado y de trabajo menor, pasa a calidad de simple entretenimiento.