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España España · bullas
Voto de ulchir:
1
Drama Georges y Anne, dos ancianos de ochenta años, son profesores de música clásica jubilados que viven en París. Su hija, que también se dedica a la música, vive en Londres con su marido. Cuando, un día, Anne sufre un infarto que le paraliza un costado, el amor que ha unido a la pareja durante tantos años se verá puesto a prueba. (FILMAFFINITY)
11 de abril de 2013
10 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace unos años decidí no volver a ver una película de este señor, pero, como algunos otros de los que aquí opinan, los críticos y "juradistas" me han engañado con tanto premio y que si había cambiado el registro y no sé qué más. Para nada, es lo mismo. Lo que este señor muestra siempre es dolor y/o violencia gratuita. No pago para sufrir. Ya los griegos pensaban que los dramas debían producir catarsis al espectador. Este experimentaba una especie de liberación interior al ver las cosas que también le hacían sufrir reflejadas en el espectáculo, pero la obra tenía algo que la producía, le daba algún tipo de sentido al sufrimiento, lo envolvía en una historia con sentido. Pero el señor Haneke de esto pasa. Se limita a restregarnos el sufrimiento (y en otras películas la pura violencia) sin más: parsimoniosamente, descarnadamente, como si la película fuera una fría lija que nos araña. Parece que a muchos críticos esto les parece maestría, porque no cae en el ese sentimentalismo tan dado a estas historias. Venga ya. ¿Poner la cámara quieta ahí y saturarnos de plano y plano de sufrimiento y dolor, es maestría? Eso es lo fácil, pero claro, otros directores no lo hacen porque no son enfermos mentales. No le ven sentido a ese frío machaque. Pero es que además ni siquiera es realista. Porque en la vida real no todo es tan negro, siempre hay algún rayo de felicidad o de esperanza, aunque sea en el descanso del dolor agudo. Este seño de esto pasa, lo destila, se centra en lo oscuro. Para los críticos sería una depuración de estilo, algo magnífico, para mí es trastorno mental, ni siquiera pesimismo.
Todo sabemos que en la vida están esos momentos tan duros, y nos pueden llegar, incluso en algún momento nos puede afectar esa violencia sin sentido que muestra en otras películas (las dos que había visto antes). Pero intentamos o esperamos que no sea así, queramos o no, huimos del sufrimiento, nos resguardamos frente a él. ¿Por qué entonces ir a ver una película de este señor? No me volverá a engañar.
ulchir
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